“Las víctimas cumplieron con grandeza la visita, una jornada marcada por el respeto y la disposición para escuchar y construir acuerdos, porque un proceso de paz también es eso: aprender a escuchar. Sus testimonio pusieron de frente por qué Colombia merece y necesita que terminemos el conflicto, por qué debemos unirnos para hacer frente al pasado, superarlo y trabajar en la construcción de una paz duradera”, expuso el jefe del equipo negociador.

Añadió que la columna vertebral del proceso de paz es justamente escuchar a las víctimas, por eso, esperan a las otras 48 escogidas, para continuar con las propuestas que hagan posible construir la paz, restituir los derechos de las personas damnificadas por el conflicto y conseguir que no haya víctimas futuras.

Sin embargo, fue enfático respecto a las críticas que ha recibido la selección de víctimas, pidiendo al país “no estigmatizar, politizar, ni dividir a las víctimas. La delegación de víctimas nos exigió llevar a buen término estos diálogos, no puede suceder que la presencia de una persona que ha sufrido la violación de sus derechos sea nuevamente victimizada solo por venir a La Habana a contar su tragedia, no podemos perpetuar el odio, queremos justicia pero no venganza”, afirmó de la Calle.

Concluyó que el Gobierno Nacional reitera el compromiso que tiene con las víctimas, que está comprometido a garantizar que este acuerdo se construya en el marco de las obligaciones nacionales e internacionales que busca proteger los derechos de todos.

De la Calle agradeció a Naciones Unidas por el “enorme esfuerzo” realizado, también al Centro de Pensamiento y Seguimiento al Proceso de Paz de la Universidad Nacional y a la Conferencia Episcopal por hacer posible el encuentro de víctimas y victimarios.

Y aprovechó el momento para citar a Navy Pillay, Alta Comisionado de las Naciones Unidas, quien afirmó que “el grupo de víctimas en La Habana puede ser pequeño, pero su presencia cambiará la dinámica hacia la construcción de mecanismos para transformar la vida de las víctimas y el nivel de respeto por los derechos humanos de todos los colombianos”, con lo que De La Calle se mostró enteramente de acuerdo.