Al encuentro asistieron el Presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet; el Presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Juan Rosell, y el Secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, entre otros. 

El mandatario colombiano explicó que en el proceso de paz no se están negociando políticas económicas, ni de desarrollo, ni de inversión, ni tributarias. Por el contrario, señaló que los recursos que dejarán de invertirse en la guerra serán fundamentales para el desarrollo social y económico del país. 

“Lo que estamos negociando en nada afecta al inversionista. No es cierto que vayamos a afectar la propiedad privada, no es cierto que estemos negociando las políticas económicas o las políticas de desarrollo o de inversión o las políticas tributarias. Nada de eso está sobre la mesa en la negociación con la guerrilla. Nada de eso ni siquiera ha sido puesto sobre la mesa”, dijo Santos. 

El Gobierno aseguró que hay grandes oportunidades en el campo por las capacidades de producción agrícola de España y estimó que en regiones enteras que no han tenido un crecimiento por la existencia del conflicto, se calcula que pueden llegar a 4, hasta el 6, inclusive hasta el 8 por ciento de crecimiento adicional. 

Con ese propósito García-Legaz manifestó que “España, como país amigo de Colombia apoya sin fisuras al Presidente Santos, y estamos dispuestos a colaborar política y económicamente con Colombia en el postconflicto, al tiempo que estamos promoviendo el apoyo al mismo de la Unión Europea”. 

Bonet, por su parte, dijo que Colombia es uno de los países prioritarios en las acciones de la Cámara de Comercio de España y también para empresas pequeñas que se encuentran en el país. 

“Esto supone una peculiaridad muy positiva que distingue a Colombia de otros mercados de la región” y precisó que más de 400 pymes españolas están en Colombia. 

Bonet agregó que Colombia es considerado por los empresarios españoles como un mercado seguro, abierto y predecible, factor que según él, ha contribuido de manera decisiva las negociaciones de paz en curso. 

Al destacar las cifras de desempleo, y explicando las políticas de reducción fiscal que se adoptaron tras la caída de los precios del petróleo, Santos aseguró que la prioridad será seguir combatiendo la pobreza en el país. 

“Esa economía sólida nos ha permitido focalizar las políticas públicas en los más vulnerables, en los más pobres, a tal punto que hoy podemos decir con mucho orgullo que Colombia en los últimos cuatro años ha sido el país que más ha podido reducir la pobreza y la pobreza extrema en toda América Latina”, concluyó Santos.