RESUMEN AGENCIAS

El exmagistrado de la Corte Constitucional, Jaime Córdoba Triviño, quien fue elegido conjuez para definir la posibilidad de que las parejas del mismo sexo puedan adoptar, indicó que no hará un pronunciamiento público sino hasta el momento de dictar sentencia.

Córdoba Triviño fue magistrado de la Corte Constitucional desde marzo de 2001 hasta febrero de 2009 y fue presidente de esa Corporación en el año 2006.

La sonada tendencia liberal de Córdoba Triviño abre la posibilidad que cese el empate en la Corte y que las cargas giren a favor de la comunidad Lgbti. De hecho, cuando fue magistrado, Córdoba Triviño fue ponente de la sentencia C-798 de agosto de 2008, que le otorgó a los compañeros del mismo sexo el derecho a la asistencia alimentaria.

Experiencia y trayectoria

Abogado y Especialista en derecho penal de la Universidad Nacional de Colombia., Córdoba Triviño tiene estudios de especialización en derecho penal en la Universidad de Salamanca y ha sido profesor de distintas universidades en Colombia y autor de varias obras relacionadas con temas jurídicos.

Igualmente, ha sido profesor invitado de las universidades Autónoma de México, Católica de Quito y de Estocolmo en la cátedra de derecho penal y derechos humanos.

Córdoba Triviño fue Juez penal de Bogotá, Procurador Delegado Penal ante la Corte Suprema de Justicia, Procurador Delegado para los Derechos Humanos, Defensor del Pueblo, conjuez de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, asesor del Comité Internacional de la Cruz Roja y de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y Vicefiscal General de la Nación.

Colombia

diversa habla

Luego que la Corte Constitucional no llegara a una decisión sobre la adopción gay y dejara la misma en manos del conjuez Jaime Córdoba Triviño, la ONG Colombia Diversa aseguró que se trata de una oportunidad de oro para eliminar de una vez por todas una “discriminación odiosa que no tiene ninguna base jurídica ni social”.

Así lo aseguró su director Mauricio Albarracín, quien estimó que “la Corte tiene una oportunidad de oro para definir su talante en protección de las minorías y sus libertades”.

Para Albarracín, Córdoba Triviño como cualquier otro conjuez de la Corte tiene altísimas calidades jurídicas, por lo que se espera que se trate de un fallo en derecho.

“Este es el fin de un largo camino para eliminar una discriminación. La Corte ya estableció derechos para las parejas del mismo sexo, ya estableció que somos una familia, ya estableció que se puede adoptar el hijo biológico del compañero y este es un paso que queda”, señaló.

Por su parte, Elizabeth Castillo, abogada y dirigente del colectivo Mamás Lesbianas, indicó que lo que importa ahora es que la Corte falle en derecho y permita la adopción plena para las parejas del mismo sexo y no solo cuando se trate del hijo biológico de uno de sus integrantes.

“Debemos ser tratados en igualdad de condiciones en el momento en que nos presentemos en un proceso de adopción”, señaló Castillo quien indicó que espera que sea un debate técnico, juicioso y con independencia de quién sea el conjuez.

Los expertos opinan sobre el conjuez

La Sala Plena de la Corte Constitucional no llegó a un acuerdo sobre la posibilidad de que las parejas del mismo sexo puedan adoptar niños.

La Sala quedó 4-4 por lo que fue necesario escoger un conjuez quien será el encargado de definir el tema. Para esto fue seleccionado el expresidente de ese alto tribunal Jaime Córdoba Triviño, quien ha sido reconocido por su tendencia liberal.

Para Juan Manuel Charry, abogado constitucionalista, el conjuez designado posiblemente seguirá por la misma línea que se ha venido dando el tema en la Corte, “de pronto con algún pequeño avance sobre esta adopción. Cabe recordar que Córdoba lo que tendrá que hacer dirimir un empate entre dos posturas en las que quedaron. No es él el que decide, es la Corte que tiene cuatro magistrados en una posición y cuatro en otra, él se puede decidir por una o plantear una tercera posición que tendría que tener el apoyo de al menos cuatro magistrados”.

Mientras que Gloria Borrero, directora de la Corporación Excelencia en la Justicia, fue enfática en advertir que “uno tiene que dejar a los jueces tranquilos, analizando el tema, y no ejercer presiones indebidas. Los conjueces fallan en derecho en la Constitución y la ley y no se debe llenar de prejuicios, porque atentan con la independencia judicial”.