En una ceremonia sencilla con la presencia del gobernadores, ministros, congresistas y los miembros de las Farc, el presidente Santos y Rodrigo Londoño, alias 'Timochenko', firmaron y dieron sus discursos invitando a los colombianos a darle la oportunidad a la paz.

Los dos resaltaron el trabajo hecho con los diferentes sectores sociales y calificaron el documento como el de todos los colombianos, dijo 'Timochenko'. "Este acuerdo de paz les pertenece, porque ayudaron a construirlo con sus esperanzas y con sus acciones".

El primer mandatario fue insistente en la necesidad que había de firmar el nuevo acuerdo dado a los diferentes asesinatos de líderes sociales que se han registrado, y que con este paso la implementación podría darse la semana entrante.

"Ese sería el día D y eso significa que 5 días después se iniciará el movimiento de las Farc hacia las zonas veredales transitorias, a los 90 días se iniciará la dejación de las armas, y tan solo en 150 días todas las armas de las FARC estarán en manos de las Naciones Unidas", dijo.

Así mismo, reconoció que este es un mejor acuerdo y afirmó que ahora, en el Congreso donde se refrendará y se implementará, espera el aporte de todos los sectores incluido el del Centro Democrático.

LA PALABRA SEA LA ÚNICA ARMA

El jefe máximo de las Farc reiteró su mensaje de que la única arma a usar en la sociedad colombiana de ahora en adelante debe ser la palabra, y que hay que vivir en la diferencia.

"Creemos indispensable que para el bien del país, la palabra sea la única arma que nos permitamos usar los colombianos (...) A nuestros adversarios públicos les digo: nuestro ramo de olivo. Nuestra invitación fraternal a convivir en la diferencia. No habrá más violencia entre colombianos por razones políticas, ese solo hecho debe llenarnos de ánimo para trabajar por hacer de esta patria un país muchísimo mejor", dijo.

De igual forma afirmó que la sociedad colombiana pide un cambio y que nadie se puede quedar por fuera de este proceso.

"En este acuerdo no se depone posiciones ideológicas, políticas y de conciencia, solo ponemos fin de manera definitiva a la guerra, para confrontar civilizadamente las contradicciones", dijo.

El jefe guerrillero pidió también, en medio de críticas a los hechos violentos que se han presentando contra líderes sociales y de izquierda, que se dé la implementación inmediatamente, e incluso habló de la importancia de hacer un gobierno de transición.

“Destacamos la importancia que tendría para el país la conformación de un gobierno de transición, cuyo propósito fundamental sea el cumplimiento cabal del acuerdo de La Habana, el cual debería estar integrado por todas las fuerzas y sectores que han trabajado por la paz", dijo.

Y por último reiteró sus disculpas: "Reiteramos nuestra solidaridad con todas las víctimas de esta guerra sea cual sea el bando al que hayan pertenecido. Así como nuestra petición de perdón por las consecuencias que para ellos hayan podido provenir de nuestras manos".

LO QUE HAY QUE HACER AHORA ES TRABAJAR POR LA PAZ

Mientras tanto, a la salida del teatro Colón, el jefe negociador Humberto de la Calle reiteró que es la hora de la paz, y el alto comisionado, Sergio Jaramillo, afirmó que es el momento de seguir adelante.

"Esto ha sido difícil, confuso pero no hay que perder la esperanza. Lo que se demostró aquí es una gran voluntad por parte de todo el mundo del Gobierno Nacional, de las Farc, de la comunidad internacional que no ha hecho sino acompañarnos. De manera que miremos de una vez hacia adelante y pasemos a la implementación", dijo Jaramillo.

Así mismo, entre los invitados, el exdiputado Sigifredo López dijo: "Esperamos que no haya más víctimas e invitamos a todos los ciudadanos, incluyendo a los que han tenido desacuerdo con este acuerdo, a que piensen que apoyar la implementación es un deber ético de todos los colombianos".