Y precisamente el mandatario, todos sus ministros y los altos funcionarios, como consejeros y superintendentes, se reunieron para llevar a cabo un ‘retiro espiritual’, que no es más que el corte de cuentas de qué se ha hecho de lo prometido en la campaña y lo que falta para cumplir las 203 promesas que hizo tras ganar la Presidencia en junio de 2018.

Fueron tres días, poco más de 30 horas de trabajo, en donde la prudencia de lo que se planificó fue la característica, al punto que no hubo la tradicional declaración del Presidente, sino un resumen muy ejecutivo, en el cual se reiteraron que las metas previstas se van a cumplir.

El balance

Pero antes de ver el futuro inmediato, a Duque y su equipo les correspondió hacer el balance de lo que se hizo en los 11 meses, que en opinión de la administración “fueron muy significativos en materia de seguridad, reactivación económica, implementación de energías renovables, medioambiente, reactivación de obras de infraestructura, recuperación del sistema de salud, inversión histórica en educación y el cumplimiento de una agenda legislativa con 16 leyes aprobadas”.

Los ejes de legalidad, emprendimiento y equidad, las bases del Plan Nacional de Desarrollo, PND, recién sancionado, fueron el inicio de la proyección del trabajo.

En legalidad, el objetivo es seguir adelante con la lucha contra el narcotráfico, en particular seguir bajando las áreas cultivadas de coca, hecho que ya ha empezado a ser reconocido por el Gobierno de Estados Unidos, el mayor crítico y colaborador en la lucha contra la ilegalidad.

Otras luchas que se reforzarán son contra el microtráfico y combatir a la delincuencia común para seguir bajando los homicidios, la extorsión y el secuestro en el país.

¿Realizable o no?

Ya con las metas definidas para el segundo año, los analistas opinaron sobre si el gobierno Duque está en la línea de lo que se debe hacer para llegar a la mitad de la administración en agosto de 2020. Por ejemplo, el profesor y analista Carlos Andrés Arias sostiene que el Gobierno debería comunicar más e informar menos. “Los consejos comunitarios (Talleres Construyendo País) no están logrando los objetivos que quiere en la población”, dice.

Arias considera, además, que la bandera de la economía naranja “no es entendible aún para el ciudadano común y corriente”, e incluso compara ese concepto con el de seguridad que hizo el expresidente Álvaro Uribe en sus ocho años de gobierno con la llamada seguridad democrática y después el expresidente Juan Manuel Santos con la paz.

“Le urge un cambio de gabinete. Está claro que el ministro de Defensa no tiene las habilidades ni administrativas ni políticas ni de comunicación para un momento como el que está viviendo Colombia con el asesinato de los líderes sociales. La ministra del Interior debe cambiarse o replantear su estrategia. Así como el de Hacienda”, plantea el analista.

Una voz algo más crítica a lo que pasó en estos tres días de ‘cónclave’ lo hizo el analista Jorge Yarce Tamayo, quien sostiene que “esa reunión es una muestra de la circunstancia penosa en la que está hoy el Presidente.