"Anunciamos al mundo que ha comenzado la segunda Marquetalia bajo el amparo que asiste a todos los pueblos del mundo a levantarse en armas contra la opresión", afirma Márquez, encargado de leer un extenso manifiesto.

En la declaración, que aseguran hacer desde el Inírida, afirman que buscarán coordinar esfuerzos con la guerrilla del Eln y con antiguos miembros de las disidencias.

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"Esta insurgencia no se levanta de las cenizas como el ave Fenix para seguir operando en las profundidades de la selva remota", dicen.

Además, aseguran que su objetivo no será el soldado ni el policía "respetuoso de los intereses populares", sino la oligarquía. "Una nueva modalidad operativa conocerá el Estado, solo responderemos a la ofensiva, no vamos a seguir matándonos entre hermanos de clase", manifiestan y también aseguran en otro de los apartes que renuncian a la práctica del secuestro (al que llaman retenciones con fines económicos), pero que entrarán "en diálogo" con empresarios en busca de financiación.

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De los tres antiguos miembros de las FARC, hasta el momento solo existe orden de captura vigente contra Santrich, quien hace pocos días abandonó su esquema de seguridad, mientras en la Corte Suprema avanza un proceso en su contra por narcotráfico, por hechos cometidos después del acuerdo de paz.

Márquez y El Paisa, por su parte, se apartaron hace varios meses del cumplimiento del acuerdo de paz y abandonaron sus esquemas de seguridad con rumbo desconocido.