¿Qué significa que el aislamiento ya no sea obligatorio sino selectivo?

Crédito: Archivo / EL NUEVO DÍA
Luego de 152 días de Aislamiento Preventivo Obligatorio, el presidente Iván Duque anunció que a partir del 1° de septiembre, el país comenzará una etapa de aislamiento selectivo, de distanciamiento y responsabilidad individual.
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Según Alexander Moscoso, viceministro de Salud, Colombia venía en un aislamiento preventivo obligatorio con ciertas excepciones. “Estábamos excepcionados para salir a determinadas partes y podíamos hacerlo. Pero estábamos en aislamiento obligatorio, estábamos en cuarentena”.

A partir de ahora, “todo está permitido, excepto lo que está restringido”, explicó el viceministro. En esta nueva etapa sólo habrá ciertas actividades específicas que estarán restringidas.

Por ejemplo, estarán prohibidas las aglomeraciones, los bares, las discotecas y el consumo de licor en espacios públicos y establecimientos de comercio.

En esta nueva etapa podrán abrir actividades sociales y económicas, como gimnasios, cines o restaurantes. Abrirán las carreteras y poco a poco todos los vuelos nacionales. Todavía no hay una determinación respecto a los vuelos internacionales.

El viceministro le explicó a COLPRENSA que el aislamiento selectivo lo que pretende es aislar no a todas la población, sino a la población en riesgo. El aislamiento selectivo permite aislar a personas positivas, a sus cadenas de contacto y a las familias de estas personas. Pero también da la posibilidad de aislar sectores, barrios e incluso ciudades que vayan presentando dificultades durante esta fase de reapertura.

“Es también aislar zonas, barrios, cuadras, localidades y hasta ciudades que presenten problemas. Es aislar sectores. Si encontramos que un sector nos está generando dificultades pues podemos tomar medidas sobre ese sector en particular”, explicó.

El aislamiento selectivo también incluye recomendaciones de autoaislamiento para personas de la tercera edad y aquellos que padezcan enfermedades crónicas. Ya no será una medida punitiva sino un ejercicio de autocuidado.

Según el viceministro, lo que hoy nos permite entrar en una nueva etapa de la pandemia es la mejora en la capacidad diagnóstica y hospitalaria y en la capacidad de respuesta a la amenaza del coronavirus, mejora que se adquirió durante estos meses de cuarentena.

Además, el paso puede darse gracias a que hoy hay ciudadanos competentes para atender esta pandemia. “Los ciudadanos hemos estado expuestos durante 6 meses a un curso intensivo de coronavirus. Todos los días nos han reforzado qué son las cosas, el lavado de manos, el distanciamiento, cómo es el contagio”, afirmó.

“Hoy tenemos un país diferente, hoy tenemos unas condiciones mejores para poder dar este paso y tenemos adicionalmente unas cifras que nos acompañan”, dijo Moscoso.

Lo que significa a fondo el aislamiento selectivo

Luis Jorge Hernández, doctor en Salud Pública y profesor de la Universidad de los Andes, le dijo a COLPRENSA que el aislamiento selectivo busca recurrir a la autonomía de las personas y de las familias.

“Lo preventivo era quédese en casa, ahora va a poder salir, pero salga con precaución. Hay más flexibilización, se van a abrir más comercios, más posibilidades de contacto con otras personas. Lo selectivo recurre a la autonomía, a la decisión de las personas, a que pueden salir pero cumpliendo con todas las medidas”, explicó Hernández.

Sin embargo, la apertura no se dará de manera inmediata ni total en todo el territorio nacional, pues el aislamiento selectivo también implica que las medidas se dictarán dependiendo a la afectación por covid-19 de cada región.

La epidemióloga Silvana Zapata le dijo a COLPRENSA que “las medidas van a ser distintas por cada territorio, no es una medida generalizada”. “La primera transición es saber en qué municipio o en qué departamento estoy ubicado y cómo van a ser esas transiciones conforme al comportamiento que va teniendo el lugar donde yo vivo”, afirmó.

Los aislamientos y las reaperturas que se autoricen en cada ciudad dependerán de su nivel de afectación. Por ejemplo, en Colombia 1.006 de los 1.122 municipios tienen afectación por covid-19. 36.19% de ellos tienen alta afectación, por lo que según Zapata, las medidas implementadas desde el 1° de septiembre seguirán siendo más restrictivas.

Aquellos con afectación moderada, es decir el 25.85% de los municipios podrán flexibilizar las medidas un poco más, y aquellos con afectación baja (27.63%) y sin casos de coronavirus (10.39%) podrán avanzar a que muchas cosas vuelvan poco a poco a la normalidad.

En ese sentido, no significa que a partir del 1° de septiembre todos en Colombia podrán salir a las calles, regresar a sus trabajos o volver a cines, teatros, gimnasios o bares.

El viceministro de salud explicó que ahora, “las ciudades de alta afectación podrán hacer restricciones sobre esas libertades. Esas propuestas se las harán al gobierno nacional y en conjunto se determinará y se harán recomendaciones más restrictivas”.

“Antes, los alcaldes y gobernadores nos pedían aperturas y nos pedían pilotos, ahora los alcaldes y gobernadores en virtud de las condiciones en los municipios o zonas de alta afectación nos pedirán lo contrario. Dirán: mire nosotros creemos que para minimizar la transmisión debemos restringir esta y esta actividad”, afirmó.

Ahora, según Zapata, los alcaldes y gobernadores tendrán que conocer cómo se comporta la pandemia en el barrio, la comuna y la ciudad, para definir los lineamientos de funcionamiento apropiados para cada una de ellas.

Las medidas de las capitales

Como la reapertura y el regreso a algunas actividades dependerá de los lineamientos de alcaldes y gobernadores, previa autorización del gobierno nacional, ya varios han adelantado lo que volverá y lo que no a partir del próximo mes.

Por ejemplo, en Bogotá terminarán las cuarentenas y volverán los restaurantes de jueves a domingo con capacidad del 25%, y con posibilidad de atender a cielo abierto, regresará la ciclovía a partir del 30 de agosto y los parques metropolitanos abrirán cada 15 días alternando con la ciclovía.

Volverán también los deportes individuales y los entrenamientos colectivos. Podrán retomar los colegios y universidades, de común acuerdo con padres y alumnos y sólo con una presencialidad del 25%.

Habrá horarios para las actividades así:

-Actividades esenciales: sin restricciones.
-Construcción: lunes a sábado de 10 a.m. a 5 p.m.
-Sector de oficina: lunes a sábado, exceptuando los jueves y con presencialidad del 30%.
-Comercio al por mayor y de poco contacto con público: lunes a jueves después de las 10 a.m.
-Comercio no esencial y al por menor: jueves a domingo sin restricción de horarios.

Pero por ejemplo, no podrán volver los conciertos, teatros, iglesias, cines y gimnasios. Solo aquellos que logren habilitar un servicio con vehículos o quienes dispongan de un modelo para la atención al aire libre.

Además, según el decreto de ‘nueva realidad’ de la Alcaldía, seguirán algunas restricciones como el pico y cédula para el ingreso a diligencias.

El plan de Medellín, por su parte, incluye la apertura de gimnasios y restaurantes a partir de la primera semana de septiembre. La segunda semana abrirían teatros al aire libre, iglesias de culto y escenarios deportivos. Para la tercera semana de septiembre volverían los casinos y los juegos de azar, junto con cines y teatros.

Ya para octubre volverían los coliseos, para noviembre los bares y discotecas, y para diciembre los eventos masivos.

En Cartagena, ciudad que ya ha pasado el primer pico de la pandemia, todavía no se conocen fechas exactas para reabrir restaurantes, bares, gimnasios, playas e iglesias. Pero la reactivación irá acompañada del regreso de varias rutas nacionales para impulsar el turismo.

En Cali ya se adelantan pilotos de reactivación de restaurantes, gimnasios y autocines. Además, se adelanta un piloto para reabrir bares a la modalidad del aire libre.

Responsabilidad ciudadana

La clave del proceso de reapertura y reactivación económica será el respeto de las medidas y los protocolos de bioseguridad. Según Zapata, evitar un nuevo bloqueo para el mes de enero y avanzar hacia un regreso a la normalidad para febrero o marzo del otro año depende exclusivamente de nosotros.

Primero, debemos convertirnos en rastreadores comunitarios y anotar nuestros movimientos y contactos en caso de contagio.

“Se tiene que basar en evitar las 3C (Cercano, Cerrado, Concurrido) o verificar que los espacios con 3C tengan las medidas de bioseguridad, el uso de las mascarilla, conservar las distancias requeridas en cada lugar, porque en varios lugares podrán variar entre 1 o 2 metros y en algunos sistemas de transporte podrían llegar hasta 37 cm”, afirmó Zapata.

Según la epidemióloga, no es suficiente con sólo usar la mascarilla, pues al menos el 85% de la población la está usando, lo importante es usarla de manera adecuada, “porque una mascarilla mal ajustada no sirve tampoco de mucho”.

Además, el tema de la protección y la responsabilidad individual es clave, pues ciudades como Bogotá o Medellín tienen altas posibilidades de rebrote, “porque no se agotó la cantidad de personas susceptibles”, como sí ocurrió por ejemplo en Cartagena o Barranquilla, donde la posibilidad de rebrote será menor.

“Es un ejercicio individual que si se hace con todas las medidas individuales que son simples, evitar las 3C, la mascarilla, lavado de manos y el distanciamiento de acuerdo al lugar, la probabilidad de contagio va a ser mucho menor y podemos ir migrando a que la gente se vaya infectando de manera paulatina, de manera no saturada”, enfatizó Zapata.

La responsabilidad del gobierno

Para Hernández, docente de la Universidad de los Andes, está claro que hay que adelantar la reapertura, “porque el virus no se va a quitar, el virus llegó para quedarse”, pero de todos va a depender que el segundo pico del coronavirus no sea tan fuerte.

Sin embargo, para el doctor en Salud Pública, no toda la responsabilidad puede recaer en el ciudadano, hay unas medidas básicas que el Gobierno tendrá que cumplir para que ese aislamiento sea en verdad selectivo y sostenible.

Por ejemplo, tendrá que seguir fortaleciendo el tamizaje, “hacer rastreo de contactos, identificar contactos de los que salgan positivos y aislarlos sosteniblemente”, explicó Hernández.

“Lo segundo que tiene que hacer el gobierno es garantizar ingreso mínimo vital a las personas de estratos socioeconómicos que no puedan hacer cuarentena, que se ve afectado su sustento”, recalcó.

Además, Hernández explicó que se debe garantizar la entrega de tapabocas gratuitos para la población para que no se utilicen bufandas o pañuelos que son inseguros, sumado a un sistema de desecho de estos elementos.

También hay que contar con puntos de lavado de manos para conductores de taxi y servicio público, expuestos en mayor medida al virus.

Pero a partir de ahora, la responsabilidad individual y colectiva será clave para pasar a una etapa post pandemia y evitar que se decreten nuevas restricciones con base en el aislamiento selectivo.

“El coronavirus está ahí, la cantidad de susceptibles es muy alta, y por eso es un llamado a que esta nueva apertura la debemos hacer con un componente principal que es el componente de la autorresponsabilidad”, es el llamado del viceministro.

Credito
COLPRENSA

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