Frente a las empresas vinculadas en las aperturas de investigación, cabe decir que el generador de carga es el remitente o destinatario de la mercancía, de conformidad con las normas que reglamentan el transporte.

Según el ente de control, ese generador de carga celebra un contrato de transporte con la empresa transportadora, pagándole un “flete”. Luego, la empresa de transporte contrata a un transportador (propietario o poseedor de un vehículo) para llevar la mercancía.

Y es que, según la normatividad de la Supertransporte, “las relaciones económicas entre el Generador de la Carga y la empresa de transporte público, y de esta con los propietarios, poseedores o tenedores de vehículos, serán establecidas por las partes, sin que en ningún caso se puedan efectuar pagos por debajo de los Costos Eficientes de Operación”.

"La situación generada por la pandemia no es excusa para incumplir ninguna ley que esté vigente, ni para suspender nuestras funciones de supervisión. Por eso, hacemos un llamado a todos los industriales y comerciantes, así como a los empresarios de transporte, para que revisen si se están cumpliendo en su totalidad las normas para el desarrollo de su actividad”, señaló el superintendente Camilo Pabón Almanza.