Los protestantes que se dieron cita la noche anterior en inmediaciones del estadio están en desacuerdo con que se disputen los partidos de la Copa Conmebol Libertadores en la ciudad, teniendo en cuenta la actual situación del país.

Desde las 6:30 de la tarde, media hora antes del inicio del juego en el estadio Romelio Martínez, empezaron los enfrentamientos entre miembros de la Policía Metropolitana y manifestantes, en las afueras del escenario, por lo que el cotejo tuvo que ser atrasado desde  su inicio, ya que empezaron a ingresar gases lacrimógenos.

El partido se tuvo que detener en cinco oportunidades en el primer tiempo, debido a que el viento hizo ingresar los gases. En una de esas detenciones, los jugadores tuvieron que ingresar al camerino por espacio de diez minutos.

Mientras eso sucedía dentro del escenario, en la calle 72 con las carreras 47 y 49 se vivió el caos. El Escuadrón Antidisturbios con fuertes chorros de agua trataba de dispersar a los manifestantes, quienes lanzaron piedras a los agentes de la Policía Nacional.

Miembros de la Misión Médica denunciaron que algunos integrantes del Esmad actuaron de manera brutal contra ellos y algunos periodistas, que estaban cubriendo el evento. Dijo que han resultado varios manifestantes heridos, entre ellos un joven que sufrió fractura de una rodilla.

Los protestantes también denunciaron que había unos infiltrados y que algunos pretendían robar en los almacenes que están ubicados en el sector. A uno de ellos lo sacaron y corretearon hasta hacerlo salir de la marcha.

Es la segunda noche de disturbios que vive la capital del Atlántico. La noche del miércoles se conoció que hubo por lo menos 80 lesionados, entre ellos algunos agentes de la Policía Metropolitana.

Entre tanto, el encuentro entre América de Cali y Atlético Mineiro culminó, mientras en los alrededores se seguían registrando enfrentamientos entre los manifestantes y los agentes del orden.

Cabe resaltar que los narradores del partido por ESPN, se solidarizaron con los protestantes e indicaron que en Colombia no hay condiciones para estos encuentros. 

La gente de Conmebol no puede insistir en que se juegue cuando oímos que a las afueras del estadio se está protestando. Un partido de fútbol no puede ocultar la situación… Es la voz del pueblo colombiano pidiendo que se pare un momentico para ver si arreglamos la situación, dijo Francisco José Vélez, uno de los comentaristas. 

DATO

Los espectadores del encuentro, denunciaron que los medios por donde se transmitió el partido eliminaron el sonido ambiente y no permitieron escuchar las detonaciones de los gases lacrimógenos