Pedro y Onil Castro fueron detenidos por la policía junto con el presunto violador, pero posteriormente quedaron en libertad al no tener vínculos con el secuestro y violación de Amanda Berry, Gina DeJesús y Michelle Knight.

En entrevista con la cadena televisiva CNN, desde un sitio fuera de Cleveland y no divulgado para proteger su privacidad, Pedro y Onil explican, sentados lado a lado, que han tenido que ocultarse junto con su madre de 71 años tras recibir amenazas de muerte por Internet. 

Pedro, incluso, aseguró que hubiera denunciado a su hermano a la Policía si hubiese sabido lo que presuntamente estaba haciendo en la vivienda. 

En la entrevista, parte de la cual fue difundida ayer, los hermanos del acusado dijeron que sus casas han sido objeto de ataques con piedras y una fue atacada por un ladrón, indicó a CNN. 

Aún así, enfatizaron que están agradecidos porque las víctimas fueron liberadas y están a salvo, si bien les atormenta que no tenían pistas de lo que ocurrió durante años en la vivienda de Ariel Castro. 

No obstante, Pedro y Onil subrayan que al no poder regresar a sus hogares, se sienten atrapados y perseguidos por los medios de comunicación por un delito que no cometieron. 

“La gente que me conoce sabe que Onil Castro no es esa persona y que no tuvo nada que ver con eso. Que jamás se le ocurriría pensar en algo semejante (al secuestro y violación de las mujeres)”, enfatizó Onil, al referirse a los cargos que afronta el acusado. 

Onil también lamentó que, antes de destaparse el presunto secuestro y violación de las mujeres, “nunca” tuvo enemigos y no dio motivos suficientes a que la gente pudiera pensar que sería capaz de cometer algo semejante. El arresto inicial de los dos hermanos causó conmoción entre sus amigos, que no podían creer lo ocurrido, agregó.  

Por su parte, Pedro Castro también insistió en que a él jamás se le hubiera ocurrido hacer algo semejante y que, si hubiera sabido lo que estaba haciendo su hermano, “llamaría a los Policías porque eso no es correcto”.