Único imputado por el caso Nisman pidió a Kirchner como testigo

AFP - el nuevo día
Once días después de su muerte, los restos del fiscal argentino Alberto Nisman fueron velados ayer en la intimidad, mientras Diego Lagomarsino, el único imputado por prestar el arma quiere que la presidenta Cristina Kirchner declare como testigo en este caso.

“No estoy bien”, dijo Lagomarsino, tenso y nervioso, al comenzar su primera conferencia de prensa en Buenos Aires, acompañado de su abogado, para detallar sus últimos contactos con el fiscal en la víspera del domingo 18 de enero, cuando apareció muerto.

El experto en informática contó que Nisman le pidió el arma diciéndole: “Ya no confío ni siquiera en la custodia”. “Me dijo que no iba a usar el arma” y que como fiscal tenía permiso deportación de armas, agregó Lagomarsino.

La transferencia de un arma de fuego a una persona sin el permiso específico para su uso es penado en Argentina con entre uno y seis años de prisión. Lagomarsino entregó el pasado sábado una Bersa calibre 22 a Nisman, quien no contaba con licencia para usar ese modelo.

Maximiliano Rusconi, abogado de Lagomarsino, calificó como “sorprendente la evocación en el mensaje presidencial que él (Lagomarsino) había iniciado el trámite para tener el pasaporte el 14 de enero”.

Credito
AFP

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