Las seis ‘más lindas’ de John Jairo Torres de la Pava

TELEANTIOQUIA.COM.CO - EL NUEVO DÍA
Avanza Elija la más linda, para escoger la obra musical más recordada de los dos compositores homenajeados en esta ocasión. Apoya EL NUEVO DÍA. Primera entrega.

Anécdotas, historias, logros, arrebatos de inspiración y hasta conquistas hacen parte de nuestro repertorio andino colombiano. De esto no están ajenas las obras postuladas en el concurso ‘Elija la más linda’, que cada año celebra la Fundación Musical de Colombia.

En esta primera parte, será el compositor itagüiseño John Jairo Torres de la Pava quien describa la particularidad de cada una de esas seis obras que le han representado dichas, triunfos y reconocimientos en los años recientes.


Ingeniero de sistemas, fundó y ha presentado el programa musical Serenata de Teleantioquia; también fue jurado alguna vez del concurso ibaguereño para los ‘herederos’ del dueto Garzón y Collazos y galardonado en repetidas ocasiones.


Si usted simpatiza con la historia, el mensaje o, simplemente, el título de alguna de estas propuestas, elíjala en el cupón que circulará hasta el 23 de febrero. Mañana se ‘confesará’ el compositor Leonardo Laverde Pulido.


Y para Torres de la Pava, Laverde, a quien conoció en Ibagué, es “mi gran amigo, un gran ser humano y un gran letrista y poeta”. Si votara por la canción más linda de él, su consentida sería el pasillo Y soy feliz, o también Un día regresaré.


De otra parte, el itagüiseño considera como su mejor y más linda creación Para cantar, una canción del género que denomina pasaje andino, esto aunque indica que “no soy llanero, pero me encanta la música de allá”.


¿QUIÉN DIJO? (1987)
“La compuse para participar en el concurso nacional ‘Mono Núñez’, en Ginebra, Valle, y así manifestar mi desacuerdo con la condición de tener que cantar la música andina vestido de campesino, ya que en la ciudad no usamos ese traje”, recuerda, aunque aclara que es un traje muy bonito y que respeta, pero que no se usa de manera consciente y con conocimiento de sus partes.

¿Quién dijo? ganó al año siguiente como obra inédita, pero le trajo muchos problemas tras las satisfacciones: “La gente, al no revisarla con cuidado, se oponía a que se presentara en muchos encuentros. Aunque me generó enemistades, a la vez me hizo conocer como compositor”, dice.


Sin embargo, y aunque dejaron en libertad la presentación personal en posteriores ediciones, De la Pava recuerda cuando en una ocasión José Antonio Rueda lo presentó en tarima como “el culpable de que quitaran dicha condición”. Según Torres de la Pava, cuando se acercó a preguntarle por qué dijo eso, Rueda le respondió con un “me mandaron a decirlo así (risas)”.


NAVEGANTE (1995)
Es una canción erótica y de las más importantes de su trayectoria, explica. Recuerda que la presentó ese año, tras haberla creado, al concurso de Composición Jorge Villamil Cordovez, en Neiva.

“En ese tiempo invitaban a los finalistas a cantarla en vivo; sin embargo, el jurado dijo que no podía quedar entre las finalistas, ya que comenzaba como un bolero, lírico y sin ritmo, y además que el erotismo no era temática de la música andina colombiana”, afirma.


Y agrega que “después de que ganó (el primer lugar) una obra de Guillermo Calderón, me dieron una mención especial por la belleza de la obra. Salí al micrófono y dije que no podía aceptar esa mención si mi canción no era un bambuco y me vetaron por 10 años de participar allí; luego (de ese tiempo) me llamó alguien a decirme que las directivas habían cambiado y que volviera a presentarme.


Torres de la Pava reconoce que es una de sus obras más importantes, “por la propuesta y la temática musical que logró con ella. La han grabado grupos como Septófono, de Bucaramanga, y el dueto Primavera, de Boyacá”.


MIS DEUDAS (1992)
“He tenido por costumbre regalar a mi mamá las letras de lo que voy haciendo, inclusive los manuscritos, los originales de lo que escribo. Después de un almuerzo, me dijo: ‘Estuve leyendo sus canciones y falta una para mí, otra para sus amigos, su ciudad y sus tíos que se fueron a Estados Unidos’.

“Esa noche trasnoché y la compuse”, trae a la memoria, y aunque afirma que de esa extensa lista quedó ‘a paz y salvo’, se siente seguro de que aún le falta mucho por escribir en reconocimiento a lo que le ocurre a diario.


“Pienso que todos los días hay motivos para hacer cosas, pero no fuerzo el momento de componer, sino que espero que me ocurra algo; sé que me faltan muchas cosas. Estoy en este momento con mi nuevo disco (Valió la pena), con esas canciones que uno quiere grabar y se van quedando”, añade.


NO ES TAN FÁCIL (abril de 1991)
Con fecha exacta de creación, recuerda que es la obra más rápida que ha escrito: tan solo cerca de tres y minutos y medio le tomó escribirla.

“Fue en Cali. La escribí así como se grabó y como la canta la gente. Todo ocurrió porque mi exesposa estaba conversando con unas amigas -en ese tiempo estábamos algo bravos- y ella, por echarme el ‘vainazo’ les dijo: ‘Es que (para él) amarme a mí es muy fácil’.


“Yo, en ese momento, estaba escribiendo un manual de contabilidad, pero cerré ese archivo y abrí uno nuevo (en blanco) y (la letra) salió de una. A veces se cambian palabras o versos, pero así, de una vez, quedaron compuestas la música y la letra”, agrega.


Una curiosa apuesta tiene Torres de la Pava en relación con esta melodía: “El que sea mayor de tres años y menor de 200, que no sea ni cura ni monja, y no se sepa esta canción, le regalo mi disco: nunca he perdido la apuesta”.


FANTASMAS (septiembre de 1981)
El Director del Festival Antioquia le canta a Colombia recuerda que esta obra es de las primeras que compuso y, tal vez, de las más conocidas mías, pero que guarda una anécdota muy curiosa.

“Yo pregunto a la gente qué entiende de la canción y cada uno la acomoda a lo suyo; eso me dio pie a no querer explicar las canciones”, asevera.


Sin embargo, esta obra, que él define como sencilla, trata del amor que uno siente en soledad, el no correspondido, pero que no parece serlo.


“Es además un amor que expresan dejándole la duda, porque cuando están con uno son tan especiales que se piensa que sí está correspondido, pero uno se da cuenta de que no, de que es como una aparición. Es una canción de desamor, de la no respuesta afectiva y de no recibir lo mismo que uno da”, describe.


Por último, y de manera algo confidente, relata que todo partió de una experiencia con la misma mujer que antes le inspiró No es tan fácil: su exesposa.


CHEPE LIBERTADOR (noviembre de 2009)
Esta composición surgió de una pasión por la historia de las grandes luchas militares de nuestro país y, a la vez, de su experiencia rindiendo honor a la Patria como bachiller, en 1978.

“No sé si tengo un gen militar, pero presté servicio como Bachiller en Bogotá y desde mucho antes me ha gustado leer la historia desde lo militar. Me apasiona”, manifiesta, y agrega que Chepe libertador es el reflejo de un personaje específico.

“Me ha causado curiosidad alguien muy curioso, el alférez José María Cancino, soldado raso que peleó en los ejércitos libertadores y que tocaba siempre un pequeño tiple muy aporreado y pisoteado al que le faltaban cuerdas”, afirma.

En el contexto de dicha obra, que es mitad realidad y mitad creación, al término de la guerra de la Independencia el general Simón Bolívar lo ascendió a coronel y lo nombró director de todas las bandas musicales marciales de Colombia”, recuerda.

Esta obra ocupó el segundo lugar en el Concurso Nacional de Composición Leonor Buenaventura de Valencia, en su versión 2010.

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En la actualidad, Torres de la Pava presenta Serenata de Teleantioquia, junto con Lina Arango.

Credito
HERNÁN CAMILO YEPES VÁSQUEZ

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