La estrategia de las grandes superficies por llegar a la base de la pirámide

Las ventas de alimentos y bebidas no alcohólicas en los supermercados siguen con tendencia a la baja. Al finalizar el siglo pasado estos productos representaban el 40 por ciento de las ventas de los almacenes de gran formato y en la actualidad, según cifras del Dane, esa participación se sitúa por debajo del 20 por ciento.

La fuerza del canal tradicional y el aumento del consumo de comidas fuera del hogar serían las razones más importantes que explican este comportamiento.

Las tiendas tradicionales mantienen su liderazgo como uno de los canales de distribución más importantes del país. Actualmente captan el 52 por ciento del negocio minorista de alimentos y en su mayoría se ubican en estratos medios y bajos.

Euromonitor Internacional, en su reciente estudio de las cinco principales tendencias en la industria del retail por países, afirma que en Colombia los “Pequeños almaceneros independientes dominan el mercado” y describe que “el reciente desarrollo de las tiendas de conveniencia representa solo una amenaza menor para los almaceneros tradicionales ya que están muy limitadas a las áreas de ingresos medios y altos, mientras que los pequeños almaceneros independientes se orientan también a la mayor población de bajos ingresos”.

A propósito de la participación del Jefe de Investigaciones de esta organización, Sean Kreidler, quien participa este año en Góndola, el encuentro anual de grandes superficies, que inaugura Fenalco mañana en Cartagena, para hablar sobre la dinámica de los canales y el consumidor latinoamericano, Euromonitor afirma que “las tiendas de abarrotes enfocadas en precios bajos apuntan a un importante segmento de la población… contribuyen a moderar los incrementos de precios dentro de las diferentes categorías en las cuales compiten”.

Esta situación ya comienza a reflejarse en el mercado con el exceso de ofertas y rebajas en las grandes superficies. Hasta hace unos seis años un 15 por ciento de la mercancía ofrecida en un supermercado se encontraba en oferta, y hoy día ese porcentaje se ha duplicado, llegando inclusive a representar hasta un 40 por ciento para el caso de ciertas líneas de mercancías como los productos de aseo personal y para el hogar.

El “uso y abuso” de las promociones podría reducir los márgenes operativos del comercio a niveles históricamente bajos.

Volver a ganar cuota de mercado en la venta de alimentos es el mayor reto que tienen hoy los supermercados y para lograrlo, vienen estudiando desde hace un buen tiempo las estrategias para llegar a la base de la pirámide.

Algunos ya han realizado alianzas comerciales con los microempresarios del canal tradicional.

Credito
GUILLERMO BOTERO NIETO*

Comentarios