Estamos sufriendo la ola de calor asociada al Fenómeno del Niño que se suma a la producida por el cambio climático global. El 2018 registró el cuarto grado más alto de aumento de temperatura conocido en el mundo. Los noticieros nacionales nos informaron poco sobre los incendios e inundaciones devastadoras en el hemisferio norte. Ahora nos toca también a nosotros, y en especial a los colombianos, dado que nuestro territorio, por su ubicación tropical, es uno de los más vulnerables. Ya sabemos del riesgo cada vez mayor de incendios forestales que amenazan vidas y sostenibilidad económica. Nuestras montañas (que son muy jóvenes) no resisten la acumulación de aguas y por lo tanto son proclives a los deslizamientos, afectando vías y causando represamientos de ríos y quebradas.
Algo que los científicos afirman, nos permite afrontar con responsabilidad estos riesgos inherentes al cambio climático, es disminuir a la mitad, para dentro de 10 años, la emisión de combustibles fósiles y para dentro de 20 años a una cuarta parte. Por supuesto que lo anterior no se logra si no se detiene ya la inversión en exploración y explotación de petróleo y carbón. Tampoco si no hay un cambio de las energías sucias de hoy hacia las energías limpias.
Los gobiernos y los ciudadanos que los elegimos, somos los responsables de las decisiones en materia de energías, transporte e industria que afectan el clima. Es ahora o nunca. El Gobierno Nacional tomó la decisión en contravía y estimula y estimulará la contaminación mediante el incentivo a la minería y al uso de combustibles fósiles. Mientras llega el 2022, algo podremos mitigar si elegimos alcaldes y gobernador de nuestro departamento que se comprometan con defender los recursos hídricos y ejecutar proyectos en transporte, industria local y regional que utilicen y produzcan energías limpias. Educar para el futuro, es educar para mitigar la incertidumbre del cambio climático. Ahora, no es que nos salgan, que como Trump niega esta realidad, necesitamos de “su apoyo crucial” y debemos comprar a “América” sus tecnologías sucias que otros no compran.
jaimecalde@yahoo.com
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