Estamos en mora de comenzar a aplicar el concepto de Smart Cities o ‘Ciudades inteligentes’ y, sin embargo, ya les estoy planteando que debemos abandonar ese concepto.
Pero no renunciar a él por desidia. Si les digo que hay que abandonarlo, es porque en realidad debemos pensar en ‘Territorios Inteligentes’ como espacios y momentos en los que confluyen las tecnologías con una visión de sostenibilidad para satisfacer las necesidades básicas de las personas y las organizaciones.
En los ‘Territorios Inteligentes’ se tiene una visión mucho más incluyente. Muchas veces, las personas del campo se sienten excluidas, con justa razón, de los planes para hacer más eficiente una zona. El muy glamuroso concepto de ‘Smart Cities’ piensa en cómo mejorar el tráfico masivo, una de esas preocupaciones que no necesariamente comparte el campo.
En un ‘Territorio Inteligente’, la ciudad/región involucra esas TIC, por ejemplo, para medir los niveles de polución o de la calidad del agua en tiempo real y así alertar a la población y mejorar las políticas del Estado con una cartografía precisa y pertinente. De igual manera, a través de sensores, tener alertas en tiempo real para la gestión del riesgo (tormentas, inundaciones, deslizamientos e incendios), y así facilitar el trabajo de las agencias de seguridad y socorro, y facilitar evacuaciones preventivas.
Pero sin llegar a las emergencias, imaginen por un momento que con tecnologías de geolocalización en tiempo real, los ciudadanos sepan desde su móvil por dónde viene el transporte público que lo puede sacar de la vereda hacia la cabecera municipal más cercana y si hay asientos disponibles en él. Todo eso significa calidad de vida, eficiencia y ahorros para todos. En toda Colombia debemos pensar más en cómo armonizar tecnologías como la Inteligencia Artificial con la inmensa cantidad de datos que hoy se producen pero no se analizan y así tener mejor calidad de vida para los ciudadanos.
Si a la capa de la infraestructura con la llegada de la red 5G en los próximos meses se le suma la voluntad política desde el Estado para trabajar con datos abiertos y procurar calidad de vida, estaremos habitando verdaderos territorios inteligentes.
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