Es la Silver Economía, estúpido

Columnista Invitado

El cambio demográfico en nuestro país, al igual que en los países de ingresos altos, transformará nuestro panorama social, político y económico. Ya no será la “economía, estúpido”, sino la “Silver Economía, estúpido”.
PUBLICIDAD

Para el 2050, el 27 % de la población colombiana estará por encima de los 60 años, más del doble de lo que es hoy, en una dinámica que avanza con rapidez. Hace 50 años una mujer colombiana llegaba a tener en promedio 6.5 hijos, mientras que hoy está por debajo de dos. Esto dará lugar a una reducción de nuestra población a finales del presente siglo. Si bien para algunos, el envejecimiento es una amenaza para la sostenibilidad de los sistemas pensionales y de salud, la realidad es que las personas mayores son un segmento para el cual el país y las empresas deberán actuar en consecuencia, como una oportunidad de desarrollo. 

Las primeras estimaciones que ha hecho Colpensiones sobre la actividad económica relacionada con los adultos apuntan a que la Silver Economía representa una proporción del PIB del 12.8 %. Con una población que recibe ingresos ya sea de pensiones, patrimonio acumulado, familiares o directamente del Gobierno. Mientras la pobreza general rondaba el 30 % en 2019, para el segmento de las personas mayores de 60 años fue del 22 %. Con más de $50 billones anuales, los ingresos de los pensionados, por ejemplo, no sufren por las crisis económicas y, por el contrario, se mantiene estable, no depende del nivel de empleo o de los embates de la economía global. Si bien ese poder adquisitivo no crece en el margen intensivo (más ingreso por habitante adulto), sí crece en el margen extensivo (más habitantes adultos con ingresos). 

Es aquí donde la Silver Economía cobra relevancia desde el lado del consumidor quien busca el mayor bienestar posible. Hay que conocerlo a profundidad porque la diversidad de sus preferencias puede marcar el éxito de quien pretende satisfacer sus necesidades. El consumidor adulto es cauto, valora la seguridad y la certeza sobre cualquier cosa, se enfoca en productos y servicios que para el común son exclusivos para jóvenes. La población adulta busca entretenerse, viajar junto a otros adultos; incluso la mitad de ellos son solteros y les interesa encontrar pareja. No todos son digitales, pero no se puede asumir que solo son análogos. Cuando llegamos a edades adultas nos comienzan a prohibir ciertas comidas o ingredientes con un enfoque hacia la comida saludable, pero la oferta de Silver Restaurantes aún es limitada. Los sedentarios prefieren entretenerse en casa, los activos buscan alternativas de distracción de todo tipo y también aprender. No en vano fue noticia Luis Chiquito, un adulto paisa de 104 años que ganó su doctorado en ingeniería en una universidad británica. No será el único y este tipo de noticias será más común.

Algunas iniciativas en el país ya se han anticipado a esta realidad y han pegado primero que todos. Una de ellas es en el Eje Cafetero y en la Costa Caribe, donde el sector inmobiliario ofrece soluciones habitacionales especializadas que poseen un alto grado de autovalencia para personas mayores. No son ancianatos, pero sí cuentan con adaptaciones para la vida en edades avanzadas. También es creciente el número de lugares dirigidos a los más adultos que no cuentan con las habilidades para permanecer solos en casa, donde pueden pasar el día, mientras trabajan los otros miembros de la familia. A nivel de ciudades, llama la atención el compromiso de Armenia por ser una Silver Ciudad. 

 

JUAN MIGUEL VILLA LORA

Comentarios