Desidia, ineficiencia e irresponsabilidad
Siento la obligación moral de escribir nuevamente sobre el regreso a clases de los niños; la razón es que la desidia y la ineficiencia de las autoridades sigue imperando. Como comenté en una columna anterior, luego de la presión de un sinnúmero de expertos y de sectores de la sociedad civil, muchos salieron a anunciar con bombos y platillos la apertura de un colegio, tratando de engañarnos; pero la realidad es que la situación sigue siendo la misma.