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En 1993 inicio la adecuación de la vía férrea a la avenida ferrocarril que hoy conocemos, coronada con la locomotora de ferrocarriles nacionales de Colombia después de ser trasladada de su antigua ubicación cerca de la Casa de la Moneda, ahora ubicada frente a la actual terminal de transportes donde estaba la antigua estación central del tren, Pedro Nel Ospina demolida para darle paso a la nueva edificación de la terminal.
El traslado de la locomotora a través de casi ocho kilómetros tardo 10 horas, sumándole más tiempo para la instalación en su actual sitio, la locomotora número 33 con un peso de 50 toneladas fue desarmada y vuelta armar, un proyecto de logística técnica y humana digna de recordar.
Este monumento embellece el sector y es un símbolo de la Memoria histórica de la ciudad, hoy, en el año 2021, habitantes en condición de calle que se resguardan en la locomotora y Policías del grupo de protección turismo y patrimonio nacional rescatan la memoria del monumento para los ibaguereños.
Con el fin de preservar, conservar y sostener los sitios de interés turístico de la capital musical, el grupo de Protección y Turismo con el apoyo y colaboración de habitantes en condición de calle y la comunidad del sector dedicaron un día para limpiar y restaurar la locomotora 33 de Ferrocarriles Nacionales en la estación de Ibagué.
“La llegada del tren era todo un acontecimiento. Allí nos recibían con viandas y fiesta, bizcochos calentanos y tamal. Se vivía un día especial” decía Pedro Elías Navia antiguo operario de Ferrocarriles Nacionales de la estación de Ibagué.
Mantener el monumento es un deber para las nuevas generaciones, que nunca montaron en una de estas locomotoras, sitios como este, trasladan a las personas en la historia, sitios como este, son parte de nuestros ancestros, son recordatorio permanente del esfuerzo de los que antes estuvieron, sitios como este son la transición del pasado al futuro, como lo es la misma avenida ferrocarril que conecta la ciudad antigua con la nueva, una ciudad que busca su desarrollo y crecimiento, pero que no debe olvidar su pasado.
Dios y Patria
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