De shopping en Ibagué

Ricardo Ferro

Reconozco las cualidades personales y profesionales de Clara López, una mujer preparada y con un amplio recorrido en el sector público. Sin embargo, en su primera visita oficial en calidad de Ministra del Trabajo a Ibagué dejó la sensación de que le interesan más los votos que las acciones al frente del cargo que ostenta.

Los ibaguereños nos quedamos esperando los pronunciamientos contundentes e innovadores de la Ministra para solucionar problemas como las altas cifras de desempleo que arrastra la ciudad hace varios años, la informalidad que viene haciendo que la capital musical se convierta en la capital del rebusque, los vergonzosos primeros lugares en trabajo infantil, o por lo menos pronunciamientos sobre temas más coyunturales y de actualidad como los despidos de mujeres embarazadas por parte del alcalde y las denominadas por algunos medios “masacres laborales” que se han presentado en la administración municipal en estos primeros seis meses de gobierno.

Peno no, la Ministra le dio prioridad al proselitismo plebiscitario. Además, cerró la puerta a cualquier pregunta de fondo sobre sus tareas cuando de entrada salió con respuestas destempladas y de cajón como “El Ministerio de Trabajo no crea empleo”.

¿Qué pensarán al respecto los miles de trabajadores que hoy en día luchan por mejores condiciones laborales y que no han tenido la posibilidad de contar con las mismas oportunidades?

Al final de la visita de la ministra quedarán muchas fotos para el recuerdo, no solo en su cuenta de twitter, sino en los celulares de algunas personas que las guardarán por unos meses, mientras otro alto funcionario venga a la ciudad. Pero cuando vuelva la Ministra del Trabajo o su reemplazo seguramente continuará el desempleo cercano al veinte por ciento, los mismos ibaguereños se seguirán levantando a rebuscarse lo de la comida del día y lo del arriendo, seguiremos con niños que en lugar de estar yendo a estudiar tienen que trabajar como cualquier adulto, y seguramente las investigaciones en el Ministerio por los temas laborales en la alcaldía de Ibagué, que son de público conocimiento, dormirán el sueño de los justos.

Claro que si en el Ministerio de Trabajo llueve en la Alcaldía de Ibagué no escampa, porque al alcalde se le escucha más hablar de otros temas como la consulta popular y las inhabilidades de Gustavo Petro para ser candidato presidencial que por ejemplo del empleo de los ibaguereños.

A propósito del empleo y el emprendimiento: Ojalá que por arrogancia no se vayan a dejar perder programas exitosos de administraciones anteriores. Acá no se trata de quién lo hizo y quién no, sino de que funciona y que no.

Un gobierno no debe partir de la premisa de que todo lo anterior es malo y que por lo mismo se debe volver a arrancar de ceros.

En el sector público el único postulado que sobre el particular aplica es el de construir sobre lo construido.

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