Seguimos en elecciones, como quien dice, seguimos en las mismas y con los mismos. Mejor dicho, seguiremos lo mismo. Pocas esperanzas de cambio y muchos desesperanzados. Pesimismo o falta de optimismo. Ni se sabe, más fácil conocer el significado de ‘Tutaina Tuturumaina’ o el de ‘Antón tiru liro’, que ya se están cambiando por ‘Hampón a tiro liro la’.
Como para elecciones se necesitan candidatos, ya están apareciendo y de todos los pelambres, con o sin información, con o sin respaldo económico, político o mafioso, con o sin rabo de paja, unos que firman a ruego y hasta un lagarto gigante y una gata. Claro que tienen que conseguir los avales y en ese parto de mulas, disminuye el número de aspirantes por los que los ciudadanos pueden botar su voto.
Se abre la gallera para iniciar el desafío, pesar y calzar los gallos y catear las espuelas con limón para evitar las envenenadas, si no se ha puesto de moda la cianurizada. Se rocean con bocanadas de Tapa Roja los muslos de los gallos, se ponen los gallos en el ruedo y el juez anuncia el monto de las apuestas de lista y el porcentaje para la gallera, sueltan los gallos y se inicia la gritería. ¡‘Pulmonielo’! ¡Mátelo saraviado! ¡Un millón a quinientos! ¡Pago y doblo la apuesta! Terminada la pelea los apostadores de lista retiran lo ganado y los de palabra reciben lo ganado entre abrazos y Tapa Roja. La palabra de gallero es como una escritura, como debe ser la del que tiene poder. Terminado el desafío los asistentes a la gallera inician la rumba que va hasta el amanecer.
Una buena lección para los politiqueros que respiran odio y utilizan el ‘todo vale’ para vencer el contendor. El poder, la justicia fletada, los aportes de contratistas y narcos, propaganda oficial y cuanta triquiñuela aparezca en el camino. Les importa ganar, especialmente si son de los que le temen a la verdad y se llenaron los bolsillos con la violencia.
Con la campaña llegan las cortinas de humo y los ramos de flores. Cortinas para tratar de difuminar el pasado de alcantarilla por el que son recordados, y las flores, a falta de propuestas en beneficio de la región y del país, se acompañan con cemento, tejas de eternit, trago, papayera y ofrecimiento de puestos y contratos. Y con la propaganda engañosa prenden el fogón para el sancocho electorero adobado con odios, mentiras, disparos contra la paz y la verdad y mucho bagazo para favorecer la corrupción y la impunidad.
Los que quieran su porción pueden hacer cola antes de que llegue el cuasi ex fiscal Néstor Humberto Martínez contra quien se está organizando la “Marcha de Linternas”, convocada para el viernes 11 de enero a las 6 p.m. en las plazas del país y embajadas internacionales para pedir su renuncia, pues el pueblo no aguanta más el cinismo de este fiscal Martínez, principal implicado en el más grande escándalo de corrupción del país, como es el caso de Odebrecht, en el cual ‘Cianurito’ no solo se lucró con los sobornos, redactando contratos y documentos jurídicos encaminados a ocultar la trama de corrupción más grande de nuestra historia, sino que llegó a la Fiscalía, de la mano del Cartel de la toga, a tapar y desviar las investigaciones, echando mano hasta de herramientas non santas. Se espera, por lo tanto, una masiva participación de los que apoyan la lucha contra la corrupción.
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