La gallera

Héctor Manuel Galeano Arbeláez

El pollo fino se entrena para la pelea desde que se va formando; buenos muslos, movimientos rápidos, buena picada y buen movimiento de patas. Se lleva tapado a la gallera llena de público que grita desesperadamente esperando el espectáculo. Los gallos tapados son pesados y por el peso se cazan las peleas, se muestran al público y se anotan las apuestas.

Los careadores los ponen en el ruedo y se hacen las pruebas de las espuelas previamente colocadas por los calzadores, el juez ordena el despeje del ruedo, prende el reloj y sueltan los animales para iniciar la pelea en medio de la gritería de los que quieren ver sangre.

¡Póngaselas en el guargüero… a los pulmones Palomo!! Un millón a quinientos mil por el Gavilán!!! Pago! Gritan los apostadores no anotados. Los gallos siguen botando sangre que entusiasma más a los espectadores que disfrutar ver la sangre derramada, siempre y cuando no sea la de ellos. Terminada la pelea se pagan las apuestas y los ganadores a celebrar la victoria con aguardiente.

Estábamos celebrando y repartiendo las ganancias cuando de uno de los apostadores salió el “esta noche ganamos con el Palomo, pero en las elecciones ganamos con el candidato del partido Naranja”!! Pero ese es amigo de la violencia que nos tiene en la olla! Le gusta la sangre!, replicó otro. Pues como a los galleros, pendejo! Pero lo de los galleros es solo entre nosotros y no jodemos ni a los del caserío que ni siquiera figura en el mapa y no tiene ni escuela ni puesto de salud.

“No joda más con su gallo anaranjado que se nos tira la reunencia, y terminamos mariputiando la corrupción de los contratos para robar la plata del Estado que es de nosotros y que la utilizan para pagar votos, dichos de testigos cianurizados, no protegidos por el fiscal que espera canonización, de cortinas de humo para esconder responsabilidades, de los regalos de Odebrech, de los atentados ficticios, de la legalización del robo de tierras a los indígenas y los campesinos, de los soldaditos de plomo que formaron a un ministrico y toda esa cantidad de vainas que hacen para joder el país”. “No joda más y vámonos que va a empezar la otra pelea, Aceptemos que seguimos en plena violencia”.

Ñapa 1.-Hace algunos años el gobierno colombiano le regaló a España una colección de piezas arqueológicas de nuestro patrimonio cultural, sin que apareciera una protesta. Ahora sale a flote el tesoro del Galeón San José, naufragado en aguas colombianas, con un cargamento de tesoros precolombinos robados a nuestros indígenas. Y también aparecen colombianos que añoran el colonialismo y pretenden que España tiene derecho sobre nuestro patrimonio. No es extraño por lo tanto el esfuerzo por continuar despojando de sus tierras a los indígenas, siguiendo el ejemplo de la anarkada casa Valencia.

Ñapa espiritual.- Primer Encuentro Nacional de Duetos Tradicionales de Música Andina Colombiana se realizará en Ibagué los días 12, 13 y 14 de junio del presente año. El respaldo recibido a nivel nacional demuestra que la cultura es espiritual y no objeto de mercado.

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