Nos lleva satuple

Héctor Manuel Galeano Arbeláez

Un joven caballista y ganadero que arrancó con capital económico y político en el Puerto Boyacá “Capital antisuversiva de Colombia” y fue colaborador de Invercolsa Londoño en “La hora de la verdad”, cargado de pasado y títulos falsos, aparece como Director Ejecutivo de la Justicia Penal Militar, un señor Ramírez Londoño. No se necesita investigar mucho por quien se convierte en la esperanza de venganza de militares corruptos, terceros y envainados con la justicia que añoran su estatus social que defienden como sea.

Es solo una muestra de lo que sigue para darle gusto a los que tanto temen a la verdad que solo los asusta cuando se pelean los de la pandilla como lo estamos viendo en este debate electoral donde lloran cuando de sacan los cueros al sol para luego organizar la cortina de humo, sin importar el sicariato. Pelean sin cuartel y se unen hasta con el diablo para triunfar, pero, sin pensar en el bienestar de los electores llevados a las urnas con dinero mal habido, amenazas y promesas de culebrero milagrero.

Todo por la plata. A eso hemos llegado. Lo importante es el dinero y mejor si es del Estado, de todos nosotros. Ejemplo lo dan empresarios nacionales, muy prestigiosos ellos, aliados con mafiosos extranjeros para robar con contratos de obras como las empresas Mota Engil (portuguesa) y Constructora Brasil S.A. Claro que si las alianzas son con las empresas de Sarmiento todo queda en casa, como los túneles de la Línea y las carreteras de cuatro letras y la entretención con Hidroituango. Veremos el chorro de babas con el juicio a Aida Merlano, socia política de Roberto Gerlein y los Char, por su negocio electorero. Nos queda faltando la condecoración a Luis Camilo Osorio por su fiscalía al servicio del paramilitarismo.

La politiquería nos tiene polarizados, tanto que todo se arregla a plomo. El asesinato de líderes sociales, de indígenas, afros y campesinos se volvió rutinario. A nadie conmueven. No se protesta. Solo silencio para que la trashumancia electoral siga creciendo y se dejen de lado los problemas del país.

La lucha anticorrupción quedó en veremos. El fortalecimiento de la justicia va quedando en los que salen libres por vencimiento de términos. La preocupación por el medio ambiente se ha reducido a lamentos por los incendios en todo el departamento. La Pola padece un depravador que madruga a alimentar palomas sin importar las protestas de los habitantes del sector que defienden sus ranchos y la salud de los niños. Dizque esperan que lo condecore Cortolima.

Ñapa.- El viernes se inauguró Casa Café (Cra.7-A 19-41), un centro cultural para impulsar la lectura y el amor por los libros. Merece su visita y su apoyo.

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