Viviendo en Barataria

Nuestros jueces han conseguido una ínsula donde plasmar sus ocurrencias. Recientemente, el Tribunal Administrativo del Tolima, luego de cinco años de análisis, dejó sin norma aplicable la vivienda campestre en Ibagué, pero no vio inconveniente en que el POT extendiera el perímetro urbano más allá del hidrosanitario, en contravía del parágrafo Segundo del artículo 12 de la Ley 377 de 1997:

En guardia

La semana anterior arranqué hablando del “subsidio al salario mínimo”, queriendo decir “subsidio de las pensiones del salario mínimo”. Hecha la corrección finalicemos este asunto diciendo que su ajuste por encima del IPC viene absorbiendo las mesadas ligeramente superiores, que en adelante quedan indexadas por aquél. Duque arrastró un 3 % de la nómina y Petro podría duplicar el efecto, drenando aún más las arcas oficiales.

¿Más para los mismos?

La semana pasada vimos cómo según un estudio del Externado, el salario mínimo en 2017 estaba subsidiado 71 % y 75 % para hombres y mujeres, en su orden. Hoy la proporción supera ampliamente el 80 %. La explicación fue dada por Duque en enero pasado: “En estos 4 momentos de negociación del salario mínimo en los cuales ha participado nuestro Gobierno, hemos consolidado acumuladamente un aumento en términos reales del 11.6 %”. 816.000 pensionados (54,4 % de la nómina de Colpensiones) tuvieron incrementos superiores a la inflación acumulada, todo contra el gasto público, pues los “ahorros” no les alcanzan.

El rompecabezas pensional

Ya nos anticiparon el prólogo de la Reforma Pensional con la intención de gravar las mesadas en la tributaria. Sobre este asunto hay verdades difíciles de decir y comprender. Intentaré exponer algunas sobre el régimen de prima media (RPM). 

¡Viva la paz…!

“Así trinaba alegremente un colibrí… Y el pobre pajarillo trinaba tan feliz sobre el anillo feroz, de una culebra mapaná”. Traigo otra vez a cuento los manidos versos del ‘Tuerto’ López, porque retratan estupendamente el alma colombiana. Su incorregible candor con incontables manifestaciones, como ese par de preguntas a flor de labios de todos nuestros reporteros principiantes.

A discreción

A los políticos les gustan los planteamientos disruptivos; esos que retan las soluciones tradicionales y los hacen brillar. Sabemos que Trump confiaba más en su impertinencia y destrezas de tahúr que en las detalladas recomendaciones de la Secretaría de Estado, para enfrentar personajes de la calaña de Vladimir Putin o Kim Yong- un. Los “outsiders” no tienen paciencia para el rigor científico ni las “curvas de experiencia” de los profesionales del ramo. Prefieren apostarle a su “carisma” y técnicas de persuasión, cuando tienen que vérselas con actores que consideran secundarios, como dictadorzuelos o celebridades del hampa.

Ni tanto que queme al santo…

Es cierto que desde finales de los años ochenta se ha venido consolidando una casta de tecnócratas, principalmente uniandinos, que colonizó los “grandes cuerpos” del Estado: Banco de la República, Ministerio de Hacienda, DIAN, Planeación Nacional. Más que una nobleza es una especie de clero que desentraña los dogmas macroeconómicos para sortear crisis como el colapso del acuerdo de cuotas del Pacto Internacional del Café (1990), la padecida a finales del Siglo XX (1998 -2003) o la financiera de 2008, esta última un terremoto que a nosotros apenas nos sacudió.

¡Ciao bambino!

De mi otra vida bancaria me quedó la maña de ser observador, detallista; fijarme en la comunicalción no verbal, cargar bolígrafo y libreta donde anotar todo aquello que pudiera dar pistas, señales a corroborar de la situación real de mis interlocutores; sus verdaderas intenciones, las perspectivas de éxito de sus alegres proyectos, etc.

¿Corrido o milonga?

Luces y sombras salieron a relucir en los empalmes. Funcionarios estrella del gobierno saliente, dos economistas de la Universidad del Rosario: el director del DANE, Juan Daniel Oviedo y el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo. El primero nos enseñó la utilidad de las estadísticas; la necesidad de su transparencia, oportunidad, de su análisis desagregado; le devolvió credibilidad a un ente anodino, solo conocido por el dato de inflación en el que nadie creía. El segundo nos libró de una ruptura democrática, por cuenta de la alevosa arrogancia de Carrasquilla y su opaco manejo de los recursos de la pandemia, aupados no solamente por el espíritu de cuerpo de sus colegas uniandinos, sino por la vista gorda de un Estado rendido a los clanes políticos.

Los verdaderos “nadies”

“Nosotros venimos sufriendo de una violencia terrible por parte del blanco en su rol de colono, de evangelizador, de terrateniente, de empresario o de actor armado, desde hace mucho tiempo antes de que aparecieran las guerrillas y los paramilitares contemporáneos. Esta historia encarna racismo, sed de riqueza, apropiación de territorios ancestrales, incomprensión a los indígenas, imposición de un modelo de desarrollo donde incomodamos”. Tiempos de vida y muerte, ONIC - CNMH (2019).