Además de los cuestionamientos hechos a la propuesta reforma a la Ley 100 presentada por el Gobierno nacional, se agrega ahora una objeción sobre incompatibilidades del ministro Alejandro Gaviria para participar a nombre del ejecutivo en el proceso de aprobación de una ley estatutaria que cursa en el Congreso de la República. 

En primer término, los mayores cuestionamientos se han hecho a la no desaparición de las EPS tal como lo anunció el Presidente Santos. Según la ley estatutaria presentada, las EPS solo cambian de nombre y ahora se llamarán “gestoras”; esto después de 2015, siempre y cuando esta figura no sea reversada en el Congreso. 

Como la ley solo se refiere a que serán gestoras, en abstracto, el concepto se presta a toda clase de interpretaciones. Una de ellas es que las EPS adquirirán más poder y control sobre la salud de los colombianos por cuantos se guardan para sí el derecho al veto y a la autorización de acciones de salud.

En segundo lugar, en una carta enviada por el senador Jorge Enrique Robledo al ministro Gaviria, haciéndola conocer al cuerpo médico y a la opinión pública, se hacen cuestionamientos a su habilitación para conducir un proceso de reforma trasparente. 

El Senador le solicita al ministro Alejandro Gaviria que ponga en consideración del Consejo de Ministros su impedimento para actuar en los debates de las dos reformas a la salud, por cuanto tres días antes de posesionarse “hacía parte de la junta directiva de Bancolombia, entidad que hace parte del Grupo Empresarial Antioqueño, que entre sus muchos negocios incluye el del aseguramiento en salud, donde posee a EPS-Sura y Sura Medicina Prepagada”.

La carta enviada el 3 de abril el senador Robledo anota que “antes de su posesión, Usted y su cónyuge estuvieron vinculados a los negocios de intermediación financiera de la banca y los seguros, poderosos sectores que tienen grandes intereses en que dichas reformas se aprueben en el Congreso en favor de sus conveniencias.  

“De manera atenta le solicito poner en consideración del Consejo de Ministros su impedimento para actuar en los debates de las dos reformas a la salud en trámite. Además, su señora esposa, Carolina Soto, era al momento de su nombramiento Vicepresidenta Ejecutiva de Fasecolda, organización que tiene como razón de ser la defensa de los intereses de las compañías de los seguros, incluidos los de salud. Que Usted y su esposa hubieran renunciado a sus cargos en los negocios mencionados una vez el Presidente lo escogió como ministro no cambia en nada su impedimento legal y menos el moral”.

Definitivamente la salud en Colombia corre con mala suerte. No solo los cambios tan esperados por los colombianos y por el cuerpo médico del país no se sucederán, sino que ahora se cuestiona la idoneidad del Ministro de Salud para llevar a buen término la trasformación del sistema de salud, tan necesario y urgente. 

El impedimento del ministro Gaviria tiene un antecedente: el del exministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, quien se vio obligado a retirarse del gobierno por una incompatibilidad semejante a la que presenta el ministro Gaviria.