Si lee este discurso en ambos sentidos, de arriba para abajo; y de abajo para arriba ¡Oh sorpresa!
En nuestro partido político cumplimos con lo que prometemos
Solo los imbéciles pueden creer que
No lucharemos contra la corrupción
Porque si hay algo seguro para nosotros es que
La honestidad y la transparencia son fundamentales
Para alcanzar nuestros ideales
Demostraremos que es una gran estupidez creer que
Las mafias seguirán formando parte del gobierno
Como en otros tiempos
Aseguraremos sin resquicio de duda que
La justicia social será el fin principal de nuestro mandato
Pese a eso todavía hay gente estúpida que piensa que
Se pueda seguir gobernando con las artimañas de la vieja política
Cuando asumamos el poder, haremos lo imposible para que
Se acaben las situaciones privilegiadas y el tráfico de influencias
No permitiremos de ningún modo que
Nuestros niños tengan una formación insuficiente
Cumpliremos nuestros propósitos, aunque
Nuestros recursos económicos se hayan agotado
Ejerceremos el poder hasta que
Comprendan desde ahora que
Somos la nueva política
Como se han dado cuenta el discurso tiene dos caras, una muestra el mensaje político; con el cual se convence al electorado, la otra es su lado oscuro, quizás su real propuesta, la cual no vemos, ¿por qué? Hoy vivimos un momento histórico en el que la sociedad, a pesar de la inmensa cantidad de conocimiento que se produce cada día, cada segundo, no es capaz de diferenciar lo que es, y no es importante; un ejemplo elemental, las tiendas escolares, tienen que ser rentables (comida chatarra), así se sacrifique la salud de los estudiantes. Además, existe una incapacidad generalizada para reconocer los problemas y adelantarse a ellos; se nota ineptitud para leer la realidad de los entornos políticos - sociales, económicos, geográficos y culturales en donde se mueve el país, lo cual, induce a decisiones equivocadas en las que lamentablemente se incluye fuertemente el sector político.
En estas elecciones que se aproximan, instalemos nuestro radar en los lugares de la memoria, en todo aquello que permita la sensatez y reflexión aplicada a los comportamientos y aptitudes de quienes hoy se postulan.
La población humana al abordar el mundo adulto refleja cómo fue su entorno de negociación afectiva en su niñez con sus padres y familia; así lo argumentan el autor del libro “Porqué somos como somos”. Ese marco de negociación afectiva determina si abordamos el mundo adulto con: Amor, Indiferencia, Rechazo, Ánimo de Destruirlo; es muy válido que hagamos este ejercicio reflexivo, con cada uno de quienes se postulan, para regir el destino de los colombianos, sin dejarnos llevar por el mundo de la propaganda, la publicidad y las palmaditas en la espalda; recuerde el discurso (leído de abajo para arriba).
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