Los dos milagros

Luis Fernando Garibello Peralta

Ya pasó la primera vuelta y sucedió que Colombia se encuentra con un ánimo renovado, tiene esperanzas y explico por qué: si Petro hubiera ganado, su capital, su casa, su empresa valdría un 30 % menos al día de hoy, una total destrucción de capital humano y físico.
PUBLICIDAD

En este sentido, hoy los colombianos sabemos que la votación Rodolfo no solo contuvo eso, sino además puede evitar para siempre que suceda un desastre. El mismo dólar que es un “ser orgánico, vivo” se relajó un poco y cedió terreno, lo cual es bueno para todos. Muchos de esos 6 millones de votos obtenidos por Rodolfo fueron de los jóvenes, siendo más sensatos de lo que creímos pues la mayoría de mayores de 50 años advertían que su voto iría por Federico. 

La última semana es una contrarreloj y Petro debe cambiar toda su narrativa, el problema es que no solo le quedan 7 días, sino que el cambio que ha mostrado desde el primer día hábil siguiente a elecciones es: odio por más odio, desprestigiar, trampa, cero esperanzas en un mapa que mostró que no quería ni a Fico ni a Petro, y para mayor desgracia del país y por ende la campaña de Petro, la primera línea amenaza en varias ciudades con incendiar el país por medio de asonadas y la “más grande revolución jamás vista” según afirman en redes, lo cual no solo demuestra el talante de él y muchos seguidores, sino que lo ocurrido desde 2018 cuando prometió salir a las calles y destruir el país, ocurrió y piensa hacerlo en su totalidad, es decir: quemar el barco llamado Colombia. 

Rodolfo Hernández muestra ejecutorias de empresario y Alcalde honesto, Petro en su paso por la Alcaldía de Bogotá demostró que el presupuesto público es agua entre sus manos y que, esos recursos, como dice Rodolfo, esa chequera de la nación, la compartiría entre otros con: Roy Barreras, Benedetti, Piedad Córdoba, los Moreno, entre otra fauna. Una vez conocimos los resultados en primera, recordé la película: Top Gun - Maverik, la misión para la cual se entrena un grupo de jóvenes y talentosos pilotos, pero sin experiencia, ellos deben cumplir su peligrosa tarea en dos minutos, volar por un cañón estrecho a una velocidad superior a la del sonido, hacerlo en dos grupos de dos aviones cada uno, y a bajísima altura para no ser detectados por los radares y por ende ser atacados. Maverik, quien lidera este grupo explica lo difícil de esta prueba, casi imposible, les dice: acá necesitamos dos milagros, como en efecto ocurre en la película. 

Esto me pareció a lo que ocurrió el domingo de elecciones, pero principalmente porque el líder de este grupo de jóvenes es un piloto curtido, con arrugas, con canas, que ha hecho su carrera a punta de talento y trabajo. Rodolfo es para mí ese piloto que quiere guiar a Colombia, que lo escogen para ello como ocurrió el 29 de mayo. No me cabe en la cabeza que los que no votaron por Petro, ahora quieran hacerlo por él, pues según el argumento de muchos de votar “contra Uribe”, en este momento no tendrían razones para no hacerlo por Rodolfo, salvo que sean como algunos que conozco: petristas vergonzantes y quieran, se destroce a Colombia para siempre.

Rodolfo se parece mucho a mi Papá, ambos mayores, sabios, trabajadores, que no han pedido un contrato a un político para comer o para comprar una casa, son dueños de sus decisiones y asume las consecuencias, que tiene en una esposa, mi Mamá, hace más de 50 años, a una amiga, socia, que nunca se han dejado de Amar, aunque discuten, cree en ella y ella en él, que no necesitó tener tres o cuatro esposas e hijos por todo lado para demostrar nada a nadie. El Hombre es el que cuida de su prole, esto ha sido mi Papá, y esto veo que Rodolfo quiere para Colombia. ¡Ya se nos dio el primer milagro, falta el segundo y creo que se dará! Confió en Nuestro Señor Jesús.

 

LUIS FERNANDO GARIBELLO PERALTA

Comentarios