Sorpresas y equivocaciones

Manuel José Álvarez Didyme

Aún resuena y es comidilla de “los mentideros políticos”, que el pasado 23 de noviembre, un periodista de una emisora local de reconocida sintonía, que ante la publicitada venida del candidato Gustavo Petro y su “primera línea” a esta musical ciudad, resolvió auscultar en vivo y en directo la opinión de algunos transeúntes, sobre su intención de voto de cara a las próximas elecciones, esperando seguramente hallar un amplio y clamoroso respaldo al nombre del visitante, con el sorpresivo resultado, que de los cinco encuestados, seleccionados al azar, sin excepción, manifestaron su rotundo desacuerdo con el personaje por las más variadas razones que, según dicen, fueron expresadas una a una ante la insistencia y posterior sorpresa del comunicador.
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Y cuentan que cada uno de ellos, -palabras más, palabras menos-, luego de identificarse pasó a expresar su rechazo al visitante junto a las razones para ello: así fue como el primero al ser preguntado, -según lo comentan-, dizque manifestó que la causa de su repulsa al candidato y jefe único de la coalición llamada “Pacto Histórico”, obedecía a que el país se encuentra fatigado de extremismos, en cuanto a posiciones políticas radicales que en nada han contribuido al mejor-estar de los colombianos, y muy por el contrario los ha llevado a la violencia e inseguridad que reinan hoy.

Y el segundo, quien se identificó como comerciante informal, cuentan que dijo no estar dispuesto a apoyar a un intemperante exguerrillero, que combatió con las armas el pensamiento diverso por la única razón de no ser el suyo propio, al punto de haber sido participe activo en la acción que concluyó, en la muerte de los más valiosos miembros de la Corte Suprema de Justicia, representantes de la ética y la inteligencia, en un país, tan requerido de dichos valores, encarnados en los Magistrados inmolados.

El que siguió, dicen que se refirió a la mediocre gestión realizada por el candidato al frente de la administración de Bogotá, cuando este fue elegido como su Alcalde, lo que para el consultado, evidencia su escasa o ninguna capacidad como gobernante.

Y la potísima razón que esbozó el penúltimo de los interrogados, dizque fue la de las actuales compañías en las que anda el aspirante a la presidencia, que no son otras que la trashumancia de estas por los distintos grupos y partidos: los Senadores Luis Fernando Velasco, caucano miembro aún del Liberal partido del expresidente  Gaviria, y Roy Barreras que pasó de ser Vargasllerista a ultranza, a feroz Uribista, para luego declararse visceral Santista y ahora hacer votos de socialpetrismo, hermanados con reconocidos actores políticos locales, oportunistas de antaño, activos miembros en el Tolima de las huestes Santofimistas, hoy “confesos” del pretendiente social-Bolivariano al solio presidencial y capitaneados por el porfiado exalcalde de esta ciudad, Guillermo Alfonso, -también añejo liberal-.

Por último y antes de que el azarado comunicador declinara su fallida tarea, el quinto de los entrevistados, al parecer también dio cuenta y razón de su desacuerdo con Petro, solo que en este caso la causa fue la simpatía y gratitud, en su sentir, que este guarda por Chávez y Maduro en razón del apoyo económico que “el movimiento bolivariano” dizque le dio en el pasado y al parecer le sigue suministrando, para que de seguro el ex M-19 cumpla su cometido y conduzca a Colombia al desastroso estado en el que aquellos postraron a Venezuela, con su desacertado gobierno y el daño que con él hacen esos incompetentes y su cauda.

MANUEL JOSÉ ÁLVAREZ DIDYME-DÔME

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