Nuevo Congreso… oportunidad de hacer historia

Anteriormente se les cancelaba por la asistencia a las sesiones, poco después aparecieron los auxilios parlamentarios, los cuales abrieron la puerta al mal uso del erario. 

Posteriormente se estableció el sueldo permanente, y en la Constitución de 1991, se otorgó el aumento automático de los sueldos, sin necesidad de establecer normas reglamentarias. De esta manera vamos en $35 millones mensuales para cada uno, pagos con fondos públicos. 

Agrego, la mayoría o casi todos llegan con una buena base de capital, que les ha permitido vivir, con muchísima dignidad. Un popular refrán dice: “el que más dinero tiene; tiene derecho a reclamar, el que no tiene, no puede reclamar”. ¿Es este el reflejo de gran parte de la historia de Colombia?, hoy en el siglo XXI existen muchísimos colombianos, que viven en miseria y pobreza, careciendo del más elemental derecho, de sobrevivir dignamente. 

Son muchas la décadas en que esta población ha sido ignorada por todos los estamentos de gobierno; existen sectores territoriales, donde los niños mueren por desnutrición, enfermedades, carecen de instancias de salud, escasea el agua, no existen medios de producción, etc,  como en Choco y La Guajira. 

El Congreso siempre ha ignorado estas regiones, que hoy están en extrema pobreza; es como si cada parlamentario fuera su “ajusticiador”, que azota el alma y el cuerpo de cada uno de sus habitantes…

Lo esperado en esta nueva transición hacia un gobierno de izquierda, es demostrar en la realidad su sensibilidad social.

Lo primero es la creación de un escenario con amplia diversidad de pensamiento, donde predominen las “Alianzas” que concilien todas hacia el bien común. Si se suma en este caso específico los $10 millones que cada congresista aportaría, se tendría un recurso significativo para atender las necesidades básicas de las poblaciones mencionadas. 

Siempre el erario esta en déficit, una de sus causas es la demasiada generosidad en unos gastos, que no deben ser responsabilidad del Estado. 

Si el Congreso empieza a trabajar, para mejorar su imagen, podría llegar a ser como lo indica el escritor Robin Sharma: “nadie creerá en nuestra capacidad para hacer grandes cosas, hasta que nosotros mismos, seamos conscientes de nuestra propia grandeza; solo entonces, nos dedicaremos con sinceridad y rigor a convertir esa grandeza en realidad. 

¿Saben lo que dijo Picasso en cierta ocasión? - cuando era niño mi madre me dijo; si vas a ser soldado, serás General. Si vas a ser Monje; terminaras siendo El Papa. En lugar de eso me convertí en Pintor y termine siendo Picasso”...