Un acto necesario de reivindicación

José Adrián Monroy

La semana anterior, en Ibagué, se realizó un sencillo pero significativo acto de protesta que realizaron los deportistas frente a los inconclusos escenarios deportivos -Piscinas Olímpicas de la calle 42 y Parque Deportivo-, en donde simbólicamente le daban sepultura y entierro a la expectativa de las grandes obras que se tenían previstas allí.

Me solidarizo con la necesidad e impotencia que deben sentir los deportistas de esta ciudad, al no encontrar sitios adecuados para practicar las diferentes disciplinas que desde siempre se han reclamado por parte de la comunidad deportiva, adicional al apoyo en infraestructura, implementos y el tan anhelado respaldo económico para los propios deportistas. Y más aún, cuando ya no se cuentan ni siquiera con los espacios destinados para ello. Por lo tanto es indispensable, que exista un compromiso real y directo del Estado en todas sus esferas - gobiernos nacional, departamental y municipal - para que a pesar de todas las vicisitudes que han tenido estos procesos, se realice un gran esfuerzo para no perder lo invertido y así poder culminarlas. Claro que deben continuar las investigaciones, que los órganos de control Procuraduría General de la Nación, Contraloría General de la República) y la Fiscalía, esclarezcan la situación, que se encuentren a los responsables, pero esas investigaciones no pueden ser óbice para que no se propenda por terminar los escenarios y así, reivindicar a la ciudad.

Más que un entierro, debemos hacer un acto de esperanza y resurrección; que toda la sociedad tolimense unida trabaje en torno al deporte. Resulta indispensable e inclusive en una obligación, pensar en un elemento esencial para el desarrollo de nuestros jóvenes, el deporte, que se convierte en ese aliento que forja carácter, disciplina, dedicación y espíritu de lucha, que traerá gloria para el Tolima y que será un bastión importante para el desarrollo de nuestra sociedad. Es el momento de hacerlo, ya es hora de mirar hacia adelante y no seguir piloteando mirando por el retrovisor.

Nota: Después de tanta especulación, ayer se firmó el convenio por 12.500 millones entre el Ministerio del Interior y la Gobernación del Tolima que hará posible la instalación de 227 cámaras para la seguridad de Ibagué en el mes de marzo de 2017; y aunque se demostró que quien realmente había gestionado las cámaras para la ciudad había sido el gobernador Barreto, el alcalde de Ibagué se comprometió a darle el mantenimiento necesario para su ininterrumpido funcionamiento. Desde ya, el Gobernador de los tolimenses se puso a disposición del Ministro Cristo para realizar la segunda fase del proyecto que traería 200 cámaras de seguridad más y así poder tener una mejor cobertura de monitoreo en nuestras calles. Una muestra más de la intención del Gobierno departamental de trabajar por Ibagué, nuestra capital.

Comentarios