El Procurador que vale oro

César Picón

La política minera y las multinacionales que se sirven de ella, parecen tener en el Tolima un gran aliado, un valeroso escudero, quizá el más fiel espadachín o, a lo mejor, un desinteresado y altruista defensor: el Procurador Agrario y Ambiental, Ernesto Cardoso.

La aparente simpatía que despierta la minería, en especial el proyecto La Colosa, en este funcionario que se supone debe defender el interés público y vigilar el cumplimiento de la constitución y la ley, despierta cada vez más asombro entre quienes vemos con sorpresa como el alto funcionario se ha convertido en un “defensor extremo”, no de los recursos naturales, ni de los derechos colectivos, sino de la minería.

Un par de años atrás, este delegado del Ministerio Público defendió a capa y espada las operaciones de Anglo Gold Ashanti en el Tolima, solicitándole a Cortolima que revocara la resolución que suspendía los trabajos de esa multinacional en el municipio de Piedras.

Adicional a esto, en numerosas ocasiones ha empeñado esfuerzos en desacreditar la consulta popular que se llevó a cabo en ese mismo municipio, aduciendo razones de ilegalidad e inconstitucionalidad, o argumentando que el tema de La Colosa ha sido simplemente una “cortina de humo” para distraer la atención de la ciudadanía.

Pero recientemente pareciera que su interés por ser el bienhechor de los mineros se hubiera exacerbado. El domingo pasado, en medio de una entrevista de este mismo periódico, se atrevió a lanzar sendas advertencias –más bien amenazas- al Alcalde y los concejales de Ibagué, por pretender convocar una consulta popular.

Su desespero también lo llevó a señalar de populistas, demagogos, e incluso fanáticos –algo que raya en el irrespeto-, a quienes han venido haciendo una defensa férrea de nuestros recursos naturales. También se inventó un nuevo concepto de Desarrollo Sostenible, uno que ni los más versados en el tema habían enunciado antes, según él consiste en “permitir el uso, explotación y extracción del recurso natural minero y hacerlo de manera responsable”. Entre otras tantas ligerezas, el flamante Procurador sugirió que a nivel territorial debería contratarse un estudio de impacto ambiental para ser contrastado con el que presentará la multinacional dueña de La Colosa, que es lo mismo que decir que las entidades públicas de la región se gasten sus pocos recursos en estudios para defenderse de algo que nunca nadie ha pedido.

Francamente me quedan muchas dudas sobre los intereses del señor Procurador en este debate. Si su intención es defender la constitución y la ley, ¿Por qué no menciona ninguna de las leyes y sentencias que respaldan las consultas populares?. ¿Por qué su afán desmedido por hacer públicas las “advertencias” para los servidores que impulsan la iniciativa, acaso no bastaría con emitir una función de advertencia?. Si son tan severas las sanciones que sobrevendrían, ¿Por qué omite decir que después de tres años los concejales del municipio de Piedras no han sido llamados a ninguna diligencia relacionada con la supuesta investigación de la Procuraduría?.

Con todo lo anterior, creo que definitivamente Cardoso es un funcionario muy valioso para la política extractivista de este país, quizá tan valioso como el mismo oro.

Comentarios