467 Años

Jaime Eduardo Reyes

Ibagué cumplió otro año más de haber sido fundada: los homenajes mostraron la división que se vive en la actualidad entre gobiernos, empresarios y comunidad.

Desde el viernes y durante el fin de semana se efectuaron algunas celebraciones. Pero la verdad, más allá del orgullo que sentimos quienes nacimos y vivimos en Ibagué, se perdió la oportunidad de aprovechar el puente de fin de semana para atraer turistas y dinamizar la economía. Ni siquiera se pensó en una fiesta del retorno, tan comunes en los pueblos cuando cumplen años, y un evento tan hermoso como la Serenata 467 años -preámbulo del 32º Festival Nacional de la Música Colombiana- hubiera podido ser mejor aprovechado. Muy poca iniciativa e imaginación tienen en la Alcaldía para este tipo de cosas.

El común de los ibaguereños no se dio por enterado de los cumpleaños, tímidamente se vieron una que otra bandera del municipio en las fachadas de las casas, algunos asistieron a los conciertos anhelando tener más eventos culturales y musicales en la ciudad. Por fortuna Ibagué no pasó en blanco gracias al regalo que entregó el Gobierno de Oscar Barreto: el puente en el Totumo, a las afueras de la ciudad porque en los barrios no lo dejan.

El Gobierno nacional, con la entrega de su regalo -ampliación de la cárcel por 60 mil millones de pesos-, mostró lo que y para lo que le interesa Ibagué (“Santos regaló a la ciudad nueva cárcel para 576 internos”, obviamente la nota no se publicó en Sociales, sino en Judicial), ¿Será esta una premonición respecto a lo que aún se espera por los sonados casos de corrupción del país y de Ibagué? El cacaraqueado nuevo aeropuerto no se entregó y se aplazó su inauguración para marzo: lo más triste de esto es que fue el alcalde Jaramillo quien salió a dar las explicaciones.

Muchos se quejaron porque en la Capital Musical no hubo un concierto de música colombiana con nuestros artistas, afortunadamente Multicentro y la emisora Ecos del Combeima le cantaron a la ciudad con el dueto Viejo Tolima y la Banda Sinfónica del Tolima.

¿Será que este lánguido cumpleaños logra llamar la atención de la Administración municipal para preparar desde ya el cumpleaños 468 el próximo año? ¿Será que se logra superar los desacuerdos entre las administraciones municipal y departamental? ¿Será que la Alcaldía y la Cámara de Comercio superan sus diferencias?

Reflexionado un poco más, el mejor regalo para la ciudad sería que las anteriores preguntas tuvieran una respuesta positiva, tal vez de esa manera Ibagué dejaría de estar en los últimos lugares para hacer negocios según el indicador Doing Business, en los primeros de desempleo según el Dane, y en los primeros de bajos ingresos según Ibagué Cómo Vamos. No hay duda de que el mejor regalo sería que todos nuestros dirigentes dejaran de lado sus diferencias políticas y personales y empujaran para el mismo lado: el bienestar de más de 500 mil ibaguereños.

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