¿Cadena perpetua para delitos contra menores?

Alfredo Sarmiento Narváez

El presidente Iván Duque Márquez ha invitado a los colombianos a reflexionar y aportar luces sobre la pertinencia de adoptar la cadena perpetua como parte del ordenamiento constitucional y legal a fin de enfrentar los delitos de abuso sexual y asesinato que se cometan contra menores edad.

Esta invitación inaugura otro punto de lo que bien se puede llamar temas de ¨frontera ética¨, temas con los cuales los colombianos quedamos interpelados en tres dimensiones a saber: 1) como sujetos capaces de hacer discernimientos estéticos, éticos y morales, 2) como sujetos culturales, inscritos en un vector espacio temporal de usos y costumbres que condicionan actitudes y hábitos de relacionamiento con el mundo externo y 3) como sujetos políticos adscritos a una comunidad que tiene un ordenamiento constitucional y legal.

Se sumaría este tema a otros que son objeto de reflexión, análisis, tensiones y decisiones entre los colombianos tales como: el aborto, la eutanasia, el reconocimiento como familia de parejas del mismo sexo con su consecuente facultad para adoptar niños, la defensa de los derechos de los animales, la legalización de la producción, comercialización y consumo de sustancias psicoactivas, y empiezan ya, no pocos sectores, a plantear la posibilidad de adoptar la pena de muerte como fórmula para enfrentar flagelos sociales tan complejos y cuestionadores como el que es objeto de esta columna.

El caso de la niña Samboní, de la niña Génesis que tuvieron tan doloroso desenlace, los casos de crecientes testimonios de personas que fueron reclutadas como menores por parte de grupos al margen de la ley y fueron abusadas sexualmente desde su temprana edad, e incluso el caso del secuestro de Cristo José, enhorabuena de feliz desenlace, ponen al país en el imperativo de encontrar soluciones.

Un referéndum como forma de introducir la figura? En Colombia las apelaciones que se han hecho a la democracia directa después de adoptada la Constitución de 1991 han dejado al país en medio de limbos decisionales, toda vez que a esos procesos les ha quedado faltando el centavo para el peso para alcanzar umbrales decisorios, incluida la última consulta anticorrupción. Limbos que por lo demás, han costado cada uno de ellos cientos de miles de millones de pesos.

¿Cadena perpetua? El ordenamiento penal vigente tiene penas de hasta 60 años para estos casos, que son casi una cadena perpetua en términos prácticos, la cual vale la pena hacer extensivas para el delito del secuestro antes que a alguien se le ocurra hacer del secuestro un delito político conexo, y legislar para quitar posibles beneficios.

Y qué tal que adoptada la figura por uno u otro medio, en 10 años, las estadísticas de abuso y asesinatos de menores siga igual y no rompa la tendencia? Sería quedarse con el pecado y sin el género, un triunfo pírrico.

Propongo: 2109 año para el Gran Pacto por Colombia con una infancia feliz y respetada. Movilizar a todos los colombianos, sus familias, los vecindarios, los estamentos educativos, los medios de comunicación, las diversas comunidades de fe, para trabajar por una nueva consciencia sobre la dignidad de los niños y niñas de Colombia. ¿Recursos iniciales? Los que se invertirían en un referéndum, según datos de la última consulta, por lo menos 300 mil millones de pesos. No es un evento electoral, donde se juegue un ego personal, se trata de una movilización por el bien común.

Comentarios