Por cuenta del aislamiento en que la injusticia de este país me ha sumido, me desboqué en unas declaraciones que hice para un insidioso reportero de ese diario. Razón por la cual me expresé en términos desobligantes y epítetos censurables a los pocos copartidarios y amigos que me quedaban.
Mis únicas referencias sobre ese territorio estaban centradas en los primos Nule, Olivo Saldaña, David Murcia, monseñor Gaitán Mahecha y Regina 11, que con sus embustes habían logrado tramar a numerosos ciudadanos de esa olvidada región del mundo.
Ahora sí me va a tocar recurrir al apoyo oficial. Por culpa de los discípulos de Wilder que se apropiaron de una de las graderías del estadio (sin pagar) y porque les arrebataron un chiro, la emprendieron contra los aficionados del equipo de César Villegas que como siempre vienen a armar alboroto en esta ciudad.
Gran discípula de Euterpe:
Leyendo EL NUEVO DÍA en el frío altiplano, me enteré de la intempestiva salida de la usurpadora del inmortal legado de mi abuela y del maestro Castilla.
Me cuentan que en un lugar de Piedrapintada, de cuyo nombre no quiero acordarme, ocurrió en el puente de Reyes un episodio ya vivido en Calambeo, pero que, a diferencia de canecas, en este caso aconteció con dos cajas fuertes.
Querida Casandra:
¿Que se fizo el carrara de Ibagué y las placas de los augustos que se ficieron? ¿Las que alguna vez tuvo? Por eso alguien decía que este era un pueblo bastardo y sin historia, porque las placas de reconocimiento de las grandes obras y los recordatorios de los acontecimientos memorables las desparecen los vándalos que en el Tolima han sido,
Doctora corazón de las redes sociales:
Acudo a su espacio y cibernético reino para comentar con mis amigas del “face” sobre los últimos acontecimientos sociales y políticos, que no sociopolíticos,