Homo hominis lupus en Barcelona Charlottesville o Bogotá

José Germán Zarama De La Espriella

En menos de ocho días, hemos recibido noticias del mundo, sobre la barbarie humana. La última, al escribir esta columna, el ataque terrorista de Barcelona. Aún está fresca la información sobre la matanza de Charlottesville, ocurrida solo un día después de conocer los avances judiciales del ‘caso Yuliana Samboni’ en Bogotá. Por instintiva asociación de ideas, recuerdo la conocida frase: ‘homo homini lupus’. Este es un repetido latinismo que significa ‘el hombre es un lobo para el hombre’.

¿Pero, por qué esta afirmación se puede generalizar en la condición humana? Pues precisamente, como recuerda la noticia del grupo neonazi de EE.UU., el hombre es un ser aún más cruel que el lobo con sus semejantes. La especie humana es capaz de someter a sus semejantes a la esclavitud, sufrimientos atroces, tortura y violación infantil, sin detenerse en contemplaciones ante asesinatos o genocidios. Esto, que ocurre repetidamente en todo el planeta, podría probar que el filósofo Hobbes, quien la popularizó, tenía bastante razón. No del todo, ya que con seguridad estaban difamando injustamente a los lobos. Y, basta, para corroborar estas aseveraciones, releer las noticias mencionadas:

Jueves 17 de agosto 2017, en horas de la mañana, una furgoneta atropelló a varias personas que paseaban en Barcelona. Las Ramblas, es una de las calles más emblemáticas y turísticas del centro de esta ciudad española. Al menos 14 personas murieron y más de 100 resultaron heridas en el atentado allá, según informaron las autoridades.

Sábado 12 de agosto de 2017. En Charlottesville, Virginia, un joven blanco estadounidense, vinculado a grupos neo-nazis, embiste con su carro a una multitud. Varios muertos y decenas de heridos son el resultado de este ataque vehicular.

Viernes 11 de agosto de 2017. El Tribunal Superior de Bogotá definirá si aumenta la condena a Rafael Uribe Noguera. Uribe Noguera es el asesino de Yuliana Samboní, una niña indígena de siete años de edad, ocurrido hace nueve meses. El infanticida, un reconocido arquitecto bogotano de 38 años, secuestró, torturó, violó y posteriormente mató a la indefensa niña.

Hobbes considera un hecho indiscutible el egoísmo del ser humano, su falta de compasión con sus propios semejantes. La sociedad, por medio del adoctrinamiento religioso y del imperio de la ley, trata de corregir tales comportamientos. Puntos algo discutibles, aunque el diagnóstico de Hobbes sobre la bestialidad humana, no deja de ser acertado. El gran dilema de nuestras democracias, es que debemos defender los derechos de toda la gente, incluyendo aquellos “lobos esteparios”. Pero esto tiene su límite de dilema y se vuelve una paradoja, pues ante hechos tan macabros uno puede defender la libertad de expresión de todos, menos las de aquellos que promueven conductas ‘lobeznas’, como son Isis o el KKK.

Comentarios