Prevención

La prevención de posibles contingencias se hace, entonces, tarea primordial que debe ser asumida y liderada por los entes de salud departamentales y municipales. Extraña, eso sí, que no se conozca pronunciamiento alguno de parte de las autoridades, ni se conoce de medidas de urgencia que permitan, con cierto grado de tranquilidad, superar la temporada.

La región se encuentra en medio de una de las más congestionadas temporadas de turismo del año. Por razones varias, entre las cuales se cuentan las facilidades que brinda la doble calzada Bogotá- Ibagué (que ya casi se culmina en el tramo Bogotá- Girardot) es enorme el flujo de viajeros que van de paso o pretenden pasar los días en el Tolima.

Coincide la época con los enormes problemas que afectan la infraestructura de salud, especialmente en lo que hace a la capital del Departamento. Conocidas de todos son las afugias que se abaten sobre el hospital Federico Lleras (el más importante de la región), a lo que se ha sumado el colapso de la Clínica Minerva, el anunciado cierre de la atención en dolencias cardiovasculares de la Clínica del Rosario y el alarmante aviso de la Clínica Tolima que ha suspendido la admisión de pacientes por el área de urgencias por tener colmada su capacidad de absorción. Lo anterior se suma a los consabidos problemas de Saludcoop lo que hace aún más sombrío el panorama en momentos en que la población flotante se incrementa sustancialmente.

La prevención de posibles contingencias se hace, entonces, tarea primordial que debe ser asumida y liderada por los entes de salud departamentales y municipales. Extraña, eso sí, que no se conozca pronunciamiento alguno de parte de las autoridades, ni se conoce de medidas de urgencia que permitan, con cierto grado de tranquilidad, superar la temporada.

Si bien estas tareas han de ser de emergencia y queda la tarea de solucionar la de la vida cotidiana, sería oportuno conocer lo que se ha planificado para otras temporadas igualmente complejas, con flujos enormes de visitantes.

En un corto plazo se escenificará la temporada de vacaciones de mitad de año, con festejos tradicionales en varios municipios y, en Ibagué, el Festival Folclórico. Para noviembre si los hados y las gestiones de los administradores se alinean, para beneficio de la región, se realizarán los Juegos Nacionales en algunas disciplinas con presencia de deportistas y turistas.

Bueno sería conocer de los preparativos que se realizan para tener cubiertas las contingencias y dar parte de tranquilidad a la comunidad.

REDACCIÓN EDITORIAL

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