Editorial: Plazos cumplidos y agendas ocultas

El ciudadano perplejo se pregunta si la tecnología para construir una cancha de tejo es muy compleja y si, como lo asegura el Alcalde, hacer una pista de BMX “solo consiste en remover tierra”, a más de que ya se cuenta con unos hermosos renders que costaron 12.5 millardos de pesos, resulta inexplicable la incuria con la que se ha manejado la ocasión única de ser sede de unos Juegos Nacionales.

A lo largo de los últimos años se hicieron públicos los reclamos de altos funcionarios del Estado por la inexplicable pachorra de la Administración municipal de Ibagué y el Ibal para entregar los diseños que supuestamente faltan y realizar las actividades requeridas para poder hacer uso de 35 millardos de pesos dispuestos por el Gobierno nacional para contribuir a la concreción del proyecto del Acueducto Complementario.

Desde el Presidente y el vice Presidente, los ministros y numerosos funcionarios de menor rango, todos a una se mostraron preocupados por la esterilización de la importante suma, mientras en otros lugares del país, con proyectos completos y necesidades acuciantes se requería de tales apoyos.

Hastiado de tanta postergación e indolencia el ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, fijó un plazo máximo del 20 de junio para que Ibagué pudiera hacer uso de los recursos, plazo que coincidía con la entrada en vigencia de la Ley de Garantías Electorales, que suspende la contratación hasta después de las elecciones de octubre.

No hay plazo que no se cumpla y el del Acueducto Complementario se venció, como lo confirmó, a este rotativo, el Ministro desde Pereira y, además anticipó que será con el nuevo alcalde, elegido en octubre, que podrá reactivarse el proyecto. Si a este le interesa, se supone.

Con la entrada en vigencia de la Ley de Garantías se puede suponer que la ciudad también pierde la sede para realizar otros tres deportes: BMX, sóftbol y tejo, ya que tampoco se ha contratado la construcción de tales escenarios, de manera que quedará la construcción en veremos y los recursos prometidos en el limbo.

El ciudadano perplejo se pregunta si la tecnología para construir una cancha de tejo es muy compleja y si, como lo asegura el Alcalde, hacer una pista de BMX “solo consiste en remover tierra”, a más de que ya se cuenta con unos hermosos renders que costaron 12.5 millardos de pesos, resulta inexplicable la incuria con la que se ha manejado la ocasión única y feliz de ser sede de unos Juegos Nacionales.

A lo mejor es que el inepto vulgo no capta la intención de la Administración, cual es la de colaborar en el control de la inflación evitando toda inversión y el empleo de recursos del Gobierno nacional en la región. ¡Brutos que somos!

REDACCIÓN EDITORIAL

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