Según la Contraloría General de la República, 1.4 billones de pesos de recursos de la salud fueron desviados por Carlos Palacino, expresidente de Saludcoop. Con el propósito de construir el conglomerado más grande de las EPS en Colombia, este hijo vergonzoso del Tolima, en asocio con un grupo de empresarios, captaron una buena cantidad de miles de millones de pesos con el fin de enriquecerse y acaparar mayoritariamente el negocio de la salud, en este nefasto sistema que tenemos los colombianos.
A pesar de que gracias a auto bonificaciones, viáticos, y gastos de representación, más de 3 mil millones de pesos resultaron exclusivamente en el bolsillo personal de Palacino, el festín no duró mucho y el exitoso grupo Saludcoop, el cual había comprado una buena cantidad de hospitales, servicios médicos, y entidades entre ellas Cafesalud, fue intervenido por el Gobierno nacional en el año 2011 y dos años más tarde Palacino y 13 de sus antiguos socios serían inhabilitados por 18 años para ocupar cargos públicos, así como requeridos por la justicia para responder en lo que ha sido calificado como el desfalco más grande que se ha hecho en Colombia.
Hoy, seis años después, el fantasma de Palacino sigue rondando, y aún mucho más en el proceso de la venta de Cafesalud. El consorcio Prestasalud fue la entidad que logró quedarse con la EPS más grande que existe actualmente en Colombia a cambio de 1,45 billones de pesos, en un proceso poco transparente, y en donde finalmente nadie más que ellos eran los compradores idóneos según la Supersalud. Además de las críticas hechas por el Procurador y en las que manifiesta que la nueva entidad no tiene la experiencia, ni la solidez para atender a los 6 millones de usuarios que registraba Cafesalud, resulta cuestionable que dentro de las IPS que conforman el consorcio y nuevo dueño de la EPS, aparece una (Medplus) en donde tiene asiento en su junta directiva, el arquitecto Jaime Barrero Fandiño, amigo personal y socio de Carlos Palacino en varios de los negocios que se realizaron en el Grupo Saludcoop, entre ellos la construcción del condominio Villa Valeria con recursos del Fosyga.
Otra de las críticas es que al ser Prestasalud, una de las empresas a las que Cafesalud les debía dinero, habría un conflicto de intereses en el cruce de cuentas, y en el que los demás acreedores podrían verse vulnerados en su derecho, además de que la cifra de 1.45 billones por las que se compró, se vería reducido en el cruce de cuentas. Lo otro que también causa malestar y de lo que poco se ha hablado, es la presencia en el negocio, de Enrique Vargas Lleras, hermano del exvicepresidente, y quien en los gloriosos tiempos de Palacino, se vio muy bien beneficiado a causa de multimillonarios contratos.
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