Mientras en países como Colombia se declara la máxima alerta y en regiones como el Tolima e Ibagué los gobiernos decretan la alerta amarilla, circunstancia que genera preocupación y algo de pánico, las autoridades de China, país asiático donde comenzó esta pandemia, informaron que el pico de transmisiones del Covid-19 llegó a su fin.
Según el portavoz de la Comisión Nacional de Salud del gigante asiático, el número de casos nuevos confirmados en Wuhan, capital de la provincia de Hubei y epicentro del brote, se redujo, por primera vez, a un solo dígito. El último recuento oficial reportó ocho casos en el último recuento oficial. Según los últimos datos oficiales, los fallecidos en China, a esta fecha, suman 3.169; mientras que el número de infectados detectados, hasta ahora, alcanza las 80.793 personas. 62.793 pacientes han sido dados de alta desde que comenzó la epidemia.
Estas cifras y estos análisis nos permiten reflexionar sobre varios aspectos. Lo primero, la asombrosa capacidad de respuesta de los gobernantes chinos, las medidas oportunas para conjurar la epidemia en poco tiempo y el liderazgo para proteger a sus ciudadanos.
Lo segundo: soportados en el número de contagiados vs el número de decesos, solo murió el 3,92% de los infectados en el país más poblado del planeta, donde viven más de mil 300 millones de personas. Murieron en China el 0,00022% del total de ciudadanos de ese país; es decir, que tomando las medidas preventivas el Covid-19 no es el fin de la humanidad, como algunas visiones catastróficas lo describen.
Otra mirada: es innegable que la economía colombiana y regional se va a resentir. ¿Cuántos no estaban alistando maletas para asistir a muchos eventos tradicionales por esta época? La Feria Internacional del Libro, el Festival de la Leyenda Vallenata, la Exposición Equina Grado A de Manizales; eventos suspendidos hasta que pase la alarma de contagio. Aún los organizadores de nuestro Festival de Música Colombiana no se han pronunciado, pero si atienden la declaratoria de emergencia sanitaria decretada por el gobierno del presidente Iván Duque, deberán suspenderlo hasta nueva fecha. A los empresarios de esos eventos descritos, a las ciudades que dinamizan la economía, ¿quién les devuelve las pérdidas?.
Aunque el Gobierno nacional retomó el rumbo y priorizó la salud de los colombianos, porque hasta el miércoles Duque estaba más preocupado por los empresarios, quedó la sensación de medidas tardías ante la pandemia mundial. Ojalá los casos sospechosos, en observación, de los que habló la secretaria de Salud del Tolima, sean solo gripas o resfriados propios de esta época; porque si esas personas resultan positivas, esperemos que no, debieron interactuar con otras que también entran al club de los “posibles”.
Por ahora, tranquilizarse, lavarse correctamente las manos, evitar contraer resfriados, utilizar tapabocas si tiene tos, puede ayudar mucho a evitar la propagación. Si los chinos pudieron, nosotros también.
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