“Vacunagate”, vacunatorio VIP y vacunas en cuarentena

Por ahora, el proceso de vacunación se encuentra paralizado en el Tolima y se desconoce qué sucederá si se pierden estas dosis y cuándo se repondrán, si es el caso.

La aplicación de las vacunas contra el coronavirus, como era de esperarse, ha desencadenado problemas, actos de corrupción y desaciertos en Latinoamérica. 

En Perú, Argentina, Chile y Brasil se han destapado escándalos relacionados con la aplicación de las vacunas. En Colombia ya se han perdido algunas dosis y ahora en el Tolima más de cinco mil vacunas “entraron en cuarentena”.

Hace pocas semanas se conoció que el año pasado en Perú 470 personas, entre funcionarios públicos, empresarios, académicos e incluso miembros de la Iglesia Católica, recibieron en secreto la vacuna de Sinopharm. Las vacunas estaban destinadas a los equipos de investigación y otras personas vinculadas con los estudios de la enfermedad. El expresidente Martín Vizcarra, que fue vacunado en octubre, un mes antes de ser destituido, es investigado junto con otros altos funcionarios.

En Argentina, el Ministerio de Salud se convirtió en la sede de vacunación exclusiva para funcionarios, políticos y amigos del gobierno, en lo que se denominó “Vacunatorio VIP”. En Chile cerca de 37 mil personas, entre personajes famosos y funcionarios públicos, recibieron la vacuna saltándose el turno de personas más vulnerables a la enfermedad y del personal médico. 

En Brasil el escándalo corrió por cuenta de las llamadas “vacunas del aire”: en algunos videos se aprecia cómo les inyectan aire a un grupo de ancianos, sin saber a ciencia cierta cuál fue el destino real de esas vacunas. En Colombia ya han desaparecido algunas dosis  y aún no se sabe si hay colados en los turnos de vacunación.

En el Tolima, se suspendió la vacunación, al detectarse que se registró una variación en la temperatura de almacenamiento de un lote de más de cinco mil vacunas, motivo por el cual dicho paquete entró en cuarentena, mientras expertos sanitarios determinan si se pueden utilizar o no. 

En este caso no se trata de un escándalo de corrupción o de funcionarios que hacen uso de su poder para saltarse la fila de la vacunación, pero sí demuestra un descuido de las entidades que no estaban tan preparadas como aseguraban, cuando de algún sector surgían cuestionamientos acerca del almacenamiento, transporte y distribución de las vacunas.

Por ahora, el proceso de vacunación se encuentra paralizado en el Tolima y se desconoce qué sucederá si se pierden estas dosis y cuándo se repondrán, si es el caso.

El Nuevo Día

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