El 12 de abril de 1861

Yhoy, en esta histórica fecha, queremos reiterar la invitación a todas sus fuerzas vivas a adelantar diferentes actividades, teniendo como eje central esta celebración.

El resurgimiento de las regiones en Colombia es una realidad. Lo pone en evidencia, el auge de varios polos de desarrollo que gravitan en torno a los principales centros urbanos, hay cinco ciudades con más de un millón de habitantes y diez con más de medio millón. Este crecimiento demográfico prueba que las regiones están ‘pidiendo pista’ y que requieren mayor autonomía política, fiscal y administrativa.  

Entre 1861 y 1905, Tolima y Huila conformaron un solo proyecto, primero como estado soberano (1861-86) y luego como Departamento hasta 1905, cuando se creó el Huila. Hoy hace precisamente 160 años, el general Tomás Cipriano de Mosquera, en rebeldía armada contra el presidente Mariano Ospina Rodríguez, creó el Estado del Tolima, quitándole a Cundinamarca las provincias de Mariquita y Honda. Este hecho, de enorme significado, debería propiciar la más profunda, amplia y fructífera reflexión respecto de hacia dónde y cómo deben orientarse nuestros destinos. No podemos quedarnos atrás en ese proceso de reverdecimiento de las regiones. Tenemos todos los ingredientes necesarios para construir un desarrollo incluyente que beneficie a los sectores tradicionalmente excluidos. Recordemos que un 12,22% de la población tiene necesidades básicas insatisfechas y que Ibagué, la octava ciudad del país por población, es la segunda con más desempleo, particularmente juvenil, y con una tasa de informalidad económica y laboral cercana al 60%.

Ahora bien, al contrario de lo que sucedía en 1861, cuando las provincias de Mariquita y Neiva producían más que Bogotá, el peso económico del Tolima es relativamente bajo, apenas un 2,18% del PIB nacional. En los últimos diez años, nuestro crecimiento ha estado por debajo del promedio de la Nación, una muy mala noticia. Un indicador de que carecemos de estrategia de desarrollo o de que la que tenemos no está funcionado. El patrimonio histórico, ambiental y cultural del Tolima es grande y diverso. Las posibilidades de potenciar el turismo a partir de él son inmensas, en especial el de naturaleza y el cultural. Para ello necesitamos una estrategia sectorial consensuada, que goce de estabilidad y de recursos, una marca región que sepa aprovechar y revalorizar los activos estratégicos, como la diversidad de pisos térmicos, su riqueza hídrica y su ubicación geográfica. Y mejorar la infraestructura. El rezago vial es grande. Algunos municipios son un destino que no conduce a ninguna parte, como si fueran el fin de la tierra.   

Esta casa editorial ha propuesto realizar una Expedición Tolima 160 años. Y hoy, en esta histórica fecha, queremos reiterar la invitación a todas sus fuerzas vivas a adelantar diferentes actividades, teniendo como eje central esta celebración. Necesitamos que los empresarios, las universidades, los ambientalistas, los medios de comunicación, y en general la sociedad civil den un paso al frente para que volvamos a tener un Tolima Grande. Es tiempo de volver a soñar y de tener grandes metas y realizaciones. Hagamos de este 12 de abril un punto de partida.

El Nuevo Día

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