La temática de las propuestas a presentar tendrán como fin realizar una intervención artística que trate sobre el conflicto interno armado colombiano, guerras internacionales, memorias de las víctimas y la construcción de paz, incluidas experiencias de acuerdos de paz y procesos de reconciliación en Colombia y otros países.

Cabe resaltar, que esta es la cuarta edición de una convocatoria en la que se seleccionan cada año propuestas que dialoguen con el contramonumento de la artista Doris Salcedo, concebido en 2017 para reflexionar a través de procesos artísticos sobre las múltiples memorias del conflicto.

Este año

Para la edición 2021, se entregarán 160 millones de pesos para la investigación, producción y exhibición de una intervención artística que se realizará entre el segundo semestre del 2022 y el primer semestre de 2023.

El ganador o la ganadora contará con la asesoría y el acompañamiento del Museo Nacional en cuanto al diseño museográfico e instalación para la puesta en escena de las obras.

¿Quiénes pueden presentarse?

Artistas o colectivos que acrediten una trayectoria de más de quince (15) años continuos de trabajo profesional. En el caso de grupos, al menos el 50% de sus integrantes deberán acreditar la trayectoria exigida.

Esta se verificará mediante la presentación de soportes que permitan visualizar la experiencia del participante en relación con la propuesta, la realización de exposiciones (individuales y colectivas) o la presencia en catálogos, libros de arte u otro tipo de publicaciones artísticas y culturales.

Los interesados podrán inscribirse hasta el 15 de septiembre de 2021 a las 5 de la tarde., y la publicación de los resultados se tiene prevista para el 15 de noviembre de 2021.

Sobre Fragmentos: Espacio de Arte y Memoria

La artista Doris Salcedo creó ‘Fragmentos, Espacio de Arte y Memoria’ en Bogotá como un lugar de reflexión sobre el conflicto armado en Colombia. Al haber invertido su significado, la artista concibió un contramonumento que, en vez de exponer una versión épica de la historia, busca crear diálogos a partir de las rupturas que el conflicto ha generado, reconociendo las experiencias extremas sufridas por millones de colombianos.

Este contramonumento se ha dispuesto como un espacio físico abierto al público para reflexionar a través de procesos artísticos sobre las múltiples memorias del conflicto.