Los asistentes de este congreso Internacional de la Educación obtuvieron valiosos aprendizajes, para ponerlos en práctica en su vida cotidiana y en las aulas de clase de los jóvenes que son el futuro de nuestro país.

Horacio Ferreyra expuso la idea de los derechos asociado, principalmente, a la educación, con la perspectiva de ser justos en la tarea educativa, abriendo horizontes de vida. También compartió experiencias de su país, Argentina. Por otro lado, explicó cómo se debe cambiar el ideal de formación desde las clases altas hasta las bajas, y dar la palabra a estas últimas para que puedan contribuir a la educación en diálogos con recursos medios y altos.

“La escuela sola no puede, es necesario que se converse y se trabaje de la mano con los educandos y que se relacionen, porque las problemáticas van más allá de lo educativo.

“Este es un derecho más que posibilita la adquisición de los otros, pero no los garantiza, para eso hay que trabajar en red a nivel social, cultural y político”.

“La niñez, juventud y formación ciudadana son fundamentales para que se establezca desde las aulas de clase la formación de personas de bien para la sociedad; para esto es importante la comunicación y no discriminar, ni juzgar los comportamientos de los adolescentes e infantes”, dijo el especialista.