En los planes del quinteto instrumental 6 Cuerdas estaba que 2015 sería el año de darse a conocer ante el país, y el camino inicia en una muy alta categoría: el 41° Festival de Música Andina Colombiana ‘Mono Núñez’.

El ensamble, conformado al interior del Conservatorio del Tolima, es el único representante de este Departamento para la venidera edición de este certamen musical nacional, que será celebrado del 4 al 7 de junio en Ginebra, Valle del Cauca.

Alta expectativa

Edison Cadena, Óscar Sánchez, Ricardo Palma, Javier Barreto y Michael Pérez conformaron este conjunto con la misión de resaltar los aires tradicionales de la región Andina y algo de los Llanos, siempre con arreglos jóvenes, propios y autóctonos.

Con esta propuesta, que ha calado en los oídos de los espectadores durante sus dos años de conformación, 6 Cuerdas se medirá a otros 13 grupos y/o estudiantinas instrumentales de Antioquia, Bogotá, Boyacá, Cundinamarca, Nariño, Risaralda, Santander y Valle del Cauca.

“Es una oportunidad importante que se nos da. Este año, cuando empezamos a buscar el espacio nacional, se nos presenta la ocasión, hemos tenido buena acogida y es todo un reto”, considera Edison Cadena, guitarrista de la agrupación.

Y lo califica así, además, porque “al ‘Mono Núñez’ no cualquiera va, eran unos 64 participantes y pasamos 14. Ya solo el hecho de pasar es un privilegio, pero no por eso hay que conformarse. Vamos a ir a hacer lo mejor y representar al Tolima”.

Bambuco, bunde, caña, chotís, contradanza, danza, guabina, marcha, merengue carranguero, pasillo, rajaleña, rumba criolla, vals y otra gran variedad de ritmos se conjugarán durante tres días en un festival organizado cada año por Funmúsica.

Y seguro varios de esos ritmos serán interpretados por la agrupación en esta edición, a la que sus integrantes llegan con la expectativa de, no solo convencer al jurado, sino, también, llevarse premios que, en el caso de su categoría, ascienden a ocho millones de pesos.

“Hay que tener en cuenta que el ‘Mono Núñez’ es el ‘Mono Núñez’, y nunca va a haber un momento en que se vea nivel bajo, sino medio alto. Es una cuestión muy dura, pero vamos con la meta de hacer la mejor muestra”, comenta Óscar.

Lo anterior se complementa con la maduración en la que ha entrado el grupo este año, para “hacer arreglos y mirar más el sonido grupal. Todos los grupos son complicados, pero vamos a ver qué podemos hacer”, finaliza el intérprete del cuatro.