La banda británica Black Sabbath ofreció la última presentación su gira ‘The end’, en Birmingham, Inglaterra, con tres de los cuatro miembros fundadores del grupo en el escenario: el vocalista Ozzy Osbourne, el guitarristas Tony Iommi y el bajista Geezer Butler.

A ellos se les unieron, en la batería, Tommy Clufetos, y en los teclados, Adam Wakeman.

La banda escogió el Genting Arena como sede del espectáculo, que lució lleno para despedir a esta mítica banda de rock, de 49 años de trayectoria.

La canción elegida para cerrar el show fue ‘Paranoid’, un clásico del heavy metal que está incluido en el álbum del mismo nombre. El tema se transmitió en vivo a través del Facebook oficial de la banda, acompañado por un espectáculo de fuegos artificiales.

El cantante Ozzy Osbourne, de 68 años, agradeció a los fanáticos por casi cinco décadas de apoyo, mientras caían cintas y globos del escenario.

“Gracias, buenas noches, muchas gracias”, exclamó Ozzbourne, antes de salir del escenario.

“Mis emociones están volando por todas partes”, había comentado previamente el artista a la BBC, durante un ensayo en el Arena.

Momentos

Osbourne, junto a Tony Iommi, Geezer Butler y el exmiembro Bill Ward crearon un sonido único, teñido del entorno industrial de la posguerra en Birmingham, que influyó centenares de otros conjuntos e inspiró a generaciones de guitarristas.

El grupo se formó en 1968 bajo el curioso nombre de Polka Tulk Blues Band (una referencia a una marca de talco en polvo). Luego se cambiaron el nombre a Earth, antes de decidirse definitivamente por Black Sabbath.

También se ganaron la reputación de llevar una vida caótica, con adicción a las drogas y peleas internas que descarrilaron la banda a finales de los años 70.

Dato

Osbourne se había retirado en 1977, y fue temporalmente sustituido por Ronnie James Dio. Pero volvió a hacer parte de la formación clásica en 1997.