“Buen viaje, maestro y amigo Héctor Mora. Pocas personas tan inspiradoras y grandiosas como usted. El viaje sigue”, así despide un viajero a otro viajero, como recibiendo un legado de aventura.

Son las sentidas palabras del periodista tolimense José Alberto Mojica, quien también cumple su labor a bordo de buses y aviones, al reconocido creador de ‘El mundo al vuelo’, quien falleció ayer a los 77 años.

Una pancreatitis, de acuerdo con el reporte de medios bogotanos, fue la causa de que llegara a esta, la última estación de un viaje que por décadas motivó a miles de tele espectadores a conocer lugares fascinantes.

Algo de su vida

El Espectador reseña que Mora, nacido en Acevedo, Huila, empezó a recorrer el mundo en 1977, con ‘El mundo al vuelo’, programa con el que emitió mil 280 documentales que rodó en 108 países, donde escribía los textos, editaba y musicalizaba.

“Mora mostraba en cada programa las culturas de cada uno de ellos, hasta cuando en 2001 se acabó el programa, a raíz de una crisis económica”, relata.

Y añade que la idea de seguir narrando las experiencias de los viajes la siguió plasmando en libros para viajeros: ‘Haciendo maletas’, ‘Adónde ir, cómo y cuando’, ‘China’ y ‘Leyendas para viajeros’, que son una guía de orientación para quienes comienzan la aventura de viajar.

Dedicó también su tiempo a lo que era su página web, en la que escribía crónicas de viaje, consejos para viajeros y opiniones sobre temas de actualidad.

Como periodista y abogado -este título lo recibió en la Universidad Libre-, Mora empezó a trabajar en la Cámara de Representantes.

“En esa misma época, siendo muy joven, propuso al canal Caracol hacer un programa de viajes que en principio se llamó ‘Cámara Viajera’, después fue ‘Pasaporte al Mundo’ y terminó llamándose ‘El Mundo al Vuelo con Héctor Mora’, nombre con el que estuvo al aire cada semana durante 23 años”.

Recibió reconocimientos importantes, entre ellos el premio Simón Bolívar, en 1984. Obtuvo también el premio El Tiempo a mejor Especial de Televisión y al mejor Periodista de televisión del milenio 2000, y el Premio a toda una vida de Anato, en la Asamblea Nacional de 2016.

Mora estaba casado con Cecilia Ramírez y tuvo dos hijos con ella: Héctor, también periodista, y Andrés.

Su legado

De sus peripecias por el mundo queda el testimonio en su página de Internet, hectormora.tv, en la que consignaba aquellas experiencias en otras ciudades y la forma de concebir estas otras realidades.

Uno de los ejemplos más recientes se enfoca en Lisboa, la capital portuguesa, de la que reseña que “duerme como un romance a orillas del río Tajo. La ciudad es un recorrido histórico y sentimental por aceras empedradas y por alamedas en fila en un paisaje que desaparece en la noche entre cánticos y luces y resurge cuando sale el sol, para contar las historias del ayer, las proezas de sus navegantes y los versos de sus monjes y poetas”.

Está “situada en un rincón geográfico de la península Ibérica, es la ciudad antigua y señorial que conserva con serenidad su paso imperial”, destacaba.

Una de sus anécdotas

El diario El País, de la capital vallecaucana, trae a colación que entre las muchas personalidades que logró entrevistar en sus correrías por el mundo, Mora recordaba la que le hizo a la fallecida Madre Teresa de Calcuta en la India.

“Durante tres días la seguí a misa a las cuatro de la mañana para lograr la entrevista, pero ella estaba en retiros espirituales y no me hablaba. Cuando lo hizo me dijo tres palabras: venga el sábado. Y así fue, tres días a su lado para conocer cómo sacaba niños de los botes de basura y cómo atendía a los enfermos”, recordó en una entrevista.

El Vaticano, Guatemala, Suecia, Ecuador, Jordania, Portugal, India, China, Estados Unidos y hasta el Tíbet son algunos de los destinos que Mora hizo pasar por la televisión colombiana.

Dato

Mora estuvo varios días recluido en el hospital universitario San Ignacio, de Bogotá, debido a sus quebrantos de salud.