“No tengo pelos en la lengua”: Alcalde de Villahermosa

HÉLMER PARRA - EL NUEVO DÍA
Carlos Evelio Herrera, alcalde de Villahermosa cuenta que en vez de ‘mermelada’ reparte chorizo en los ministerios, que en el gobierno Delgado Peñón se ha sentido huérfano y que siempre quiso ser cura.

Carlos Evelio Herrera, es un hombre muy parrandero, aunque por su cargo de Alcalde le toca guardar la compostura.

Se muestra abierto a hablar de política, pero cuando se le toca el tema personal las cosas cambian, a tal punto que afloran sus convicciones bastante conservadoras, entre ellas, el no compartir la unión de parejas del mismo sexo ni que estas adopten niños.

Igualmente dice que la soltería es un estado de vocación de vida, al cual cree quienes gustan de la política, deben optar.

Muchas de las críticas que le hacen es que nunca mantiene en Villahermosa, que vive en Ibagué, ¿tienen razón?

Yo nací en Villahermosa, conozco mi municipio, sus necesidades, su gente y efectivamente la función de un alcalde está en un proceso de gestión administrativa ante entes gubernamentales y nacionales, la plata no está en nuestro municipio. Si la plata para cofinanciar los proyectos para nuestra gente estuvieran en las administraciones locales créame que no tendría ningún sentido estar viajando constantemente a Bogotá, pero también debemos cumplir con una serie de capacitaciones y convocatorias que ejerce el Gobernador del Tolima.

Y créame que desde un escritorio quejándonos con la gente, llorando no se solucionan las situaciones que son tan sentidas; no con esto estoy diciendo que no debemos permanecer, porque claro que debemos hacer presencia en nuestros municipios, pero también nuestra ausencia es justificada.

¿Verdad que la alcaldía no le ha dejado ni para tapar los huecos frente a su casa?

Hay que resaltar que hace más de 50 años ninguna administración le ha puesto mano a la recuperación de calles urbanas en nuestro municipio, en este gobierno le colocamos el pecho a lo que muchos gobiernos anteriores no le quisieron poner un frente, que fue la ejecución del plan maestro de alcantarillado, que es una obra indispensable para empezar a recuperar la malla vial, esas incomodidades han generado algunos sinsabores en nuestros conciudadanos y entre quienes han ejercido el poder en años anteriores, y hoy desconociendo esta realidad vienen a decir que el municipio viene en un retraso.

¿Entonces sus antecesores no tuvieron planeación del municipio?

Desde el punto de vista personal y administrativo digo que sí. Creo que por más de 50 años faltó planeación de los gobiernos anteriores, pero sobre todo decisión y entereza para asumir un compromiso como este.

¿Entonces Carlos Evelio Herrera es el redentor de los villahermosunos?

No tanto el redentor de los villahermosunos, creo que ha sido uno de los alcaldes que más ha frenteado aquellas decisiones antipopulares que otros por congraciarse con el pueblo, les gusta darles pan y circo, yo vine a administrar.

¿Qué piensa de que su anterior jefe (José Ricardo Vallejo) aspire a la Alcaldía?

Yo acompañé al anterior alcalde, hice parte de su gabinete y se avanzó significativamente porque fue un gobierno que durante cuatro años contó con un gran padrinazgo, una gobernación que invirtió grandes sumas de dinero en diferentes obras que hoy se muestran y si tiene sus aspiraciones es respetable, aunque personalmente no comparto las reelecciones porque creo que vician, coartan y mutilan aspiraciones sanas de otras personas que tienen ganas de llegar.

Siendo conservador, ¿cómo es su relación con el gobernador Delgado Peñón?

He tenido una relación de cordialidad, de respeto, es el gobernador de los tolimenses, pero he sentido un poco que he tenido que asumir un costo político.

Pero también hay que destacar que ha sido un gobernador que dentro de las posibilidades le ha ayudado a Villahermosa no como nosotros esperábamos, por supuesto que Villahermosa no le aportó mucho, pero sí hemos sentido un poco en estos tres años que nos faltó más apoyo de la Gobernación, podría decir que me sentí huérfano en muchos aspectos.

Con convicción de cura

Alcalde, ¿antes de ser administrador de empresas y político qué soñó ser?

Yo quería ser sacerdote y tenía la convicción.

¿Qué lo sedujo de la religión?

Me levanté en un ambiente de sacerdotes y religiosas, me formé en instituciones dirigidas por ellos y me cautivó la intelectualidad de los sacerdotes, la parte culta, su amabilidad, su generosidad y el trabajo social.

¿Qué lo hizo desistir?

Una calamidad familiar: el asesinato de un hermano le generó a mi madre una serie de complicaciones psicológicas y afectivas a las cuales tuve que hacerle frente y por eso decidí no ingresar al seminario teniendo todo para haber hecho el proceso vocacional; todos me veían como sacerdote, hasta yo.

¿En algún momento se arrepintió?

No me arrepiento, aunque a veces sí me visualizo: si yo no hubiese estado en esto ya estuviera como sacerdote, pero pienso que me hubiera podido retirar porque en el camino se pueden presentar tantas tentaciones.

¿Hubiera cumplido con el celibato?

Yo creo que hubiera sido complicado porque no es fácil luchar contra un instinto natural del ser humano, pero creo que con una gran convicción se puede lograr. 

¿Muy rezandero?

Sí, soy un católico convencido de mis convicciones cristianas, apostólicas y romanas. Aún siendo alcalde participo como si fuera monaguillo.

¿Lo tienta mucho el diablo?

Claro, todos los seres humanos somos tentados por diferentes circunstancias todos los días, pero hay que tener un gran poder de convicción, de luchar entre el sí y el no.

¿Cuál es su mayor pecado?

Una que otra mentira que uno tiene que decir, porque lastimosamente en la política a la gente le gusta más que se le mienta que se le diga la verdad. 

¿Y noviero?

No mucho, aunque si tuve mis novias, siempre he estado más interesado en mis estudios.

Yo poco como chorizo

Alcalde, ¿con los robos que sufrió sintió que estaba salado?

No, simplemente que a veces la confianza mata.

Quienes lo ven tan puestecito se preguntan, ¿cómo se divierte?

Yo soy muy parrandero, antes de ser alcalde me gusta mucho el baile mas no el licor; igualmente me gusta el pasear y hacer deporte.

Uno de los platillos de Villahermosa es el chorizo, ¿qué tanto chorizo come el alcalde?

Yo poco como chorizo, pero lo degusto cuando tengo la oportunidad de compartir con todas las personalidades que llegan a nuestro municipio, e igualmente cuando traigo a Ibagué o llevo a los ministerios para hacer lobby, para podernos congraciar un poco con aquellos funcionarios para que nos ayuden con algunos proyectos.

¿Es decir que usted no reparte ‘mermelada’ sino chorizo?

Efectivamente...(risas) donde uno quiera que llega la gente siempre asocia a Villahermosa con ese plato.

¿A qué le teme?

A la vejez, mas aún en la sociedad de hoy en la que llegar a ser viejo le estorba y fastidia a todo mundo.

¿Qué lo saca de casillas?

Que la gente busque pretextos y excusas para no hacer lo que le toca hacer.

¿Cuál es su mayor defecto?

Soy una persona muy temperamental. Digo las cosas como se piensan, sin maquillarlas, no tengo pelos en la lengua, y eso a veces incomoda.

Dice que no tiene pelos en la lengua, ¿heterosexual u homosexual?

Yo creo que la orientación sexual de un ser humano no determina su calidad como persona, soy respetuoso de las libertades, mis derechos llegan hasta donde llegan los del otro; por eso hay que respetar la libertad u optativa del ser humano, lo importante es que su condición sea heterosexual u homosexual no afecte ni perjudique la convivencia ni el sano desarrollo de los conciudadanos.

¿Cuál es la suya?

Soy un hombre soltero, enamorado de la vida, que quiere desarrollarse profesionalmente, económica y laboralmente y creo que las cosas van llegado a su debido momento. Soy respetuoso del tema de la familia, defiendo la familia, no comparto la unión de parejas del mismo sexo ni la adopción.

Credito
EL NUEVO DÍA

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