Este homenaje de los India Catalina para Judy Henríquez hace un reconocimiento a sus 50 años de trayectoria artística en el país, un tributo del que Bernardo Romero Pereiro, su eterno compañero y confidente, le diría: “Sí, Judy, te lo mereces”.

Salvo Basile, presidente de la Junta Directiva del Festival, dijo: “Conozco a Judy y a su familia desde mi incursión en la televisión colombiana en la mítica ‘Calamar’, a través de su marido, Bernardito, y su manejo del italiano, nos unió enseguida un vínculo especial, allí comencé a admirar su capacidad interpretativa, tuve el honor de compartir con ella en Señora Isabel, obra única de nuestra televisión colombiana, ella tenía que estar en esta edición cómo merecedora del Premio Víctor Nieto a toda una vida”.

Desde su comienzo como modelo de comerciales, de pasar de las tablas al ‘séptimo arte’ y luego consolidarse en la televisión nacional, la evolución de esta artista traspasó fronteras, llegándose a consolidar como una de las actrices más destacadas en México, tierra donde vivió varios años al lado de su esposo, Bernardo Romero, quien falleció en 2005.

En Colombia otro de sus personajes que marcaron un hito en la pantalla chica fue el de la vieja Sara, en Escalona, en 1991, papel que la hizo merecedora al año siguiente de un India Catalina.

“La vieja Sara fue un reto porque ella existió, son papeles muy difíciles de representarlos, porque son inevitables las comparaciones, si ella se paraba así o no, si hablaba así o no; pero fue una gran satisfacción interpretar este personaje y, sobre, todo muy placentero haber recibido gracias a ella el Premio India Catalina que, para mí, es el reconocimiento más importante que puede recibir un actor” afirmó Judy Henríquez.

El homenaje reconoce la importancia de un artista de la televisión colombiana, que por su trayectoria ha contribuido con su vida y obra a la historia de la televisión y será entregado el sábado 15 de marzo en Cartagena.

El reconocimiento

Cuando recibió la noticia de su homenaje por Salvo, llegó a tener un poco de temor: “Me pregunté ¿será que ya no me quieren ver trabajar más o al revés? Yo lo recibo pensando que voy a seguir adelante”, puntualizó. También aprovechó para hacer un llamado a los miembros de la industria y al público, para que no olviden a los actores de su generación, destacando que la calidad actoral de éstos en su gran mayoría sigue intacta y no es justo que sean echados al olvido.

Agradeció a su familia, en especial a sus hijas, quienes, confiesa, han sido las mayores sacrificadas y por quienes se arrepiente de no haberles dedicado el tiempo que se merecían: “Son cosas de trabajo, solo espero que hoy en día, mis dos hijas que se han dedicado a esto, lo entiendan”, cerró.