Son 20 años de labores de la agrupación liderada por quien ha sido considerado, según la revista Rolling Stone, como el cuarto mejor baterista de la historia del rock, Dave Grohl, la voz y la guitarra principal.

En la retina de muchos, en especial de los amantes del ‘grunge’ que tuvo a Seatle como su campo más fructífero de cultivo de inicio de los noventa, Dave sólo necesitó cuatro años para hacer historia, al hacer parte del trío Nirvana, la banda de la ‘Generación X’, que tuvo un trágico final cuando su alma y nervio, Kurt Cobain, decidió quitarse la vida en 1994.

Los dos integrantes restantes tomaron caminos diferentes y Dave Grohl sorprendió al mundo con Foo Fighters, en especial al dejar de lado la batería y convertirse en su vocalista y guitarrista, aunque a la hora de grabar siempre vuelve a la percusión.

En tan sólo una semana grabó el álbum debut. Aunque Grohl se sentía cómodo en Nirvana, sabía bien cuál era su posición en el trío, debía concentrarse en la batería y con ella seguirle el paso a las excentricidades creativas de Kurt, pero en medio de la locura y el éxito mundial de la banda, él no dejó de escribir y grabar demos con características muy personales.

Es un ser creativo que ha demostrado, y de gran manera, que no era un personaje secundario de Nirvana tal como muchos pensaron, y su desarrollo artístico ha dado para que encabece ambiciosos proyectos.