El hombre de negocios tendrá que reinventar su estilo, incorporando en su armario prendas versátiles y fáciles de combinar que le permitan crear looks actuales sin sacrificar sobriedad, si quiere brillar en 2016.

Según Pilar Medina, gerente de Diseño de Arturo Calle, hay dos prendas clave que un ejecutivo debe renovar para lograr nuevos atuendos sin mucho esfuerzo: las chaquetas y las camisas.

Durante esta vigencia en los armarios masculinos no deberá faltar una chaqueta denim, las cuales llegan en una silueta más ajustada y en azul intenso y un blazer, ideal para lograr atuendos elegantes y espontáneos al mismo tiempo (este año se impondrá el azul cobalto en esta prenda).

Igualmente, son imperdibles las chaquetas básicas de algodón, que le permitirán acompañar estilos casuales y deportivos. Estarán disponibles en tonalidades con brillo, así como el ‘abrigo’ de lana que le aportará un toque sobrio y refinado al vestuario del día a día.

En cuanto a camisería tiene una amplia variedad, con la que se podrá lograr un sin número de combinaciones formales. “Este año, les acosejo incluir un par de camisas de siluetas justas, con puños y cuello en contraste; una moda que se impondrá en el mundo ejecutivo”, dijo.

¿Cuántos trajes?

Pilar Medina aseguró que un hombre de negocios debe tener al menos cinco opciones de trajes en los siguiente colores: los infaltables azules (el color más importante en el vestuario masculino formal); los modernos grises en tonos medios y oscuros (ya que son muy fáciles de combinar) y el emblemático negro que siempre será un básico para ocasiones formales y de ceremonia.

Respecto a materiales, sugiere el uso de trajes de lana, una fibra natural que ofrece confort y facilita la transpirabilidad, lo cual resulta bastante idóneo para los ejecutivos, dadas sus largas jornadas de trabajo. Alternar los vestidos, favorecerá la recuperación de la fibra y evitará la pérdida de estructura del traje.