El ‘peludito’ llegó al Coso después de vivir por años con una familia espinaluna que no le brindó los cuidados adecuados, y decidieron entregarlo a la Alcaldía. No obstante, en el establecimiento no se cuentan con profesionales de salud animal, ni personal de aseo que garantice el bienestar de estos, y debido a un ataque de otro canino, Toby sufrió esta lesión.

Fue gracias a las denuncias del Colectivo Animalista del Tolima, que el Procurador Regional intervino en el caso y lo trasladó al hogar de paso Dejando Huella, en Flandes, donde le hicieron la intervención pertinente y se conoció que el canino estaría así desde hace meses.

“Ahí uno se da cuenta el descuido que tienen con los animalitos”, afirmó Mariana García, integrante del Colectivo, quien pudo ver desde las afueras el Coso de Espinal y darse cuenta de las condiciones en las que viven los caninos.

“Los animalitos viven en jaulas pequeñitas en medio de sus excrementos, nadie limpia, ahí mismo donde defecan les echan la comida. No hay un personal adecuado, hay animales enfermos que no se han atendido a tiempo, por lo tanto, ya se les pronostica muy poco tiempo de vida, estamos haciendo lo posible por sacarlos de allá”, agregó.

Por este motivo el Colectivo solicitó una reunión con el alcalde del Municipio, Juan Carlos Tamayo, a la que no asistió, pero envió en su representación a la Secretaria de Gobierno y a un asesor.

El encuentro se desarrolló el 21 de octubre, no obstante, según los denunciantes no se llegaron a acuerdos puntuales, motivo por el que al día siguiente hicieron un plantón a las afueras de la Administración Municipal.

“El día de la reunión nos dijeron que tenían 30 millones presupuestados, y que con esos 30 prácticamente no se hacía nada, que ellos no iban a contratar un médico veterinario porque según la Secretaria de Gobierno, contratarlo anualmente cuesta más o menos $20 millones, y que ellos iban a gastar esos $30 millones en algunas adecuaciones”, refirió García.

Comentó que también mencionaron hacer unas esterilizaciones gratuitas en dos jornadas grandes pero que no se concretaron puntualmente.

Por otro lado, otra de las integrantes del Colectivo, mencionó que hay otra canina con una anomalía, debido a que tuvo cachorros hace un poco más de un mes y presenta mastitis, además de tener garrapatas.

Actualmente hay cuatro o cinco perros en el establecimiento ubicado en la vereda San Francisco del Municipio.

La integrante del Colectivo, que solicitó reserva en su identidad, también resaltó el desconocimiento por parte de las entidades públicas con lo que implica el maltrato animal, y la ausencia de la policía ambiental cuando se presentan estos casos.

Asimismo, de la sobrepoblación canina, las pocas campañas de esterilización y la concientización sobre el cuidado de las mascotas por parte de los espinalunos.

Pronunciamiento del Alcalde

El mandatario municipal le comunicó hace unos días a esta redacción que ese establecimiento realmente no cumple las funciones de un Coso, y que fue entregado por la Administración anterior en esas condiciones.

“Por cumplimento de norma se adquirió un terreno en una casa, pero eso de coso no tiene nada. Se hicieron unas aulas ahí pero no tiene la funcionabilidad suficiente, no hay un laboratorio, no hay un cuarto para tener algunos medicamentos, a duras penas los recibimos en esas condiciones con tres animalitos”, afirmó.

Y agregó que se apropió un dinero para instalarle un cuarto que funcione para cirugía.

“En esas condiciones es muy difícil nosotros buscar un recurso propio y cumplir la norma, (…) es un tanto complejo apropiar los recursos cuando el Gobierno Nacional nos había señalado el rumbo de algunos dineros para la contingencia del Covid”.

Sin embargo, expresó que el personal de Planeación terminó hace tres meses un diseño de construcción y remodelación del Coso, para adecuarlo como debe ser, y hacer nombramiento de personal adecuado.